Desgraciadamente, en estos últimos años se ha disparado el número de personas que tienen problemas para pagar las deudas que han contraído con sus préstamos personales y tarjetas de crédito. El problema de esta situación es que la deuda se incrementará todavía más si se alarga el impago, ya que habrá que pagar comisiones por ello.
Aunque la situación parece insalvable, existen algunas alternativas para reducir o liquidar deudas y préstamos que pueden resultar interesantes. Puede que algunas ya las hayas tenido en cuenta, pero te animamos a leerlas todas por si se te ha pasado algo por alto.
Las 5 mejores alternativas para reducir o liquidar deudas y préstamos
Incrementa tus ingresos
Sabemos que estamos diciendo una obviedad, pero es una de las maneras de reducir tus deudas.
Deberías buscar algo que te ayudase a conseguir más dinero, aunque sea poco tiempo. Por ejemplo, podríamos estar hablando de un trabajo que hagas en el fin de semana, de revisar todas tus cosas para vender lo que no estés utilizando, o cualquier otra idea relacionada que necesites.
Sabemos que para dar este paso tendrás que hacer un esfuerzo adicional, pero valdrá la pena e impedirá que tus deudas sigan creciendo.
Reduce tus gastos
La mayoría de nosotros no conseguimos tener ahorros a fin de mes porque nos organizamos muy mal. Lo primero que debemos hacer es tener constancia sobre nuestros gastos e ingresos; para ello, una buena idea es hacer una tabla con una hoja de cálculos y así obtener nuestro balance real.
Una vez tengamos la lista confeccionada, simplemente habrá que pensar que es necesario y que resulta prescindible. Esto nos permitirá reducir algo de dinero que puede traducirse en ahorro.
Y si, podemos utilizar lo que hemos ahorrado para quitarnos algo de deuda.
Cambiar la frecuencia de pago
Muchas personas tienen problemas para hacer frente a sus pagos porque simplemente no saben gestionar sus ingresos hasta que llega el final de mes. Esta falta de control puede producir gravísimas situaciones de impago que nos lleven a la bancarrota.
Una buena opción para evitar que esto te vuelva a ocurrir es cambiar la frecuencia de pago. Por ejemplo, si estabas pagando la deuda mes a mes, podrías pensar en pagarla de forma quincenal, incluso de manera semanal.
Esto nos permitirá pagar antes la deuda y evitar pagar dinero que necesitamos.
Reunificación de deudas
El gran problema viene cuando hemos acumulado muchas letras, como podría ser la de la hipoteca, del coche, o simplemente lo que vamos gastando en las tarjetas de crédito.
Una buena opción para todas aquellas que tienen tantos cargos es la reunificación de deudas.
Se trata de un recurso financiero que se emplea para agrupar los préstamos que se hayan solicitado dentro de un solo préstamo, de tal forma que tan solo se afrontaría una única cuenta. A cambio, habría que ampliar el plazo de amortización.
Hay que tener en cuenta que la reunificación de deudas exige formalizar un nuevo préstamo. En el mismo se incluirán las cuotas de la hipoteca, de las tarjetas de crédito, la letra del coche, y cualquier otro cargo.
Esta fórmula ofrece diferentes ventajas que deberías conocer:
- Tipo de interés: lo más habitual es que el nuevo préstamo tenga asociado un nuevo tipo de interés mucho más bajo. Esto permite que la cuota se pueda reducir considerablemente a cambio de alargarla en el tiempo, y así pagar las deudas de una forma más desahogada.
- Mejor control de las finanzas: será mucho más fácil controlar tus deudas si tan solo tienes un cargo cada mes. Además, las negociaciones que haya que formalizar se llevarán a cabo con la misma entidad.
Ahora bien, hay que tener en cuenta un par de inconvenientes que tiene este recurso financiero.
Tendremos que pagar más intereses durante más tiempo: esto quiere decir que la deuda será más cara (al final, habremos pagado más).
Gastos de formalización elevados: para acceder a este vehículo financiero, habrá que asumir determinadas comisiones, como la de cancelación anticipada o comisión por apertura.
Te animamos a estudiar los pros y los contras de la reunificación de deudas antes de decantarnos por este recurso.
Pagar una cuota mayor
Otra forma de enfocar el problema podría ser pensar en pagar una cuota mayor mes a mes Si la doblas, incluso la triplicas, puedes reducir notablemente el tiempo que tardarías en liquidar el crédito, además de reducir el pago de intereses.
Esto tan solo es recomendable en el caso de que consigas llegar a fin de mes con un determinado capital. Si vas muy apurado/a, es mejor optar por un recurso como la reunificación de deudas, ampliar el plazo de amortización, y llegar más desahogados a final de mes.
Ten en cuenta estas medidas y verás cómo consigues reducir o liquidar tus deudas y préstamos.
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