Imagen de archivo de un vehículo de la Policía Nacional | POLICÍA NACIONAL VALLADOLID.

Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Guardia Civil y la Ofast francesa y coordinada por Eurojust, han desarticulado una organización criminal dedicada al envío de cocaína a Europa mediante veleros. Enmarcada dentro del Plan Meridional, ha finalizado con 15 detenidos y con la incautación de más de 1.000 kilos de cocaína, 797.950 euros en efectivo, dos veleros, siete vehículos y tres armas de fuego, entre otros efectos.

En un comunicado conjunto se ha especificado que el estupefaciente era distribuido por las provincias españolas de Cádiz y Málaga, así como por la región de Ile de France --que engloba París y su área metropolitana--.

El entramado, asentado en Marbella y París, supuestamente preparaba envíos de cocaína desde el Caribe hasta Europa en veleros capitaneados por uno de los miembros de la organización y presentaba dos ramificaciones: la rama francesa, que se ocupaba de la distribución de la droga; y la española, encargada de los contactos con las organizaciones suministradoras del estupefaciente, radicadas en Colombia y Venezuela.

La investigación se inició en el verano de 2021 cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la llegada de un velero a El Puerto de Santa María (Cádiz) capitaneado por un ciudadano francés que podría estar vinculado con el tráfico de cocaína.

Las gestiones policiales practicadas, según ha agregado el comunicado, evidenciaron los vínculos existentes entre este individuo y un segundo ciudadano francés que estaba siendo investigado por la Policía Nacional por su presunta relación con el tráfico internacional de estupefacientes.

Por este motivo, los agentes solicitaron información a las autoridades policiales francesas a través de la Oficina Antiestupefacientes (Ofast) para conocer el perfil de los investigados.

El primero de ellos, según han detallado, es conocido en Francia por su vinculación con el tráfico de drogas por mar y había sido rescatado en el año 2010 en el Canal de la Mancha tras hundirse un velero que capitaneaba en solitario y sobre el que existían indicios de que transportaba cocaína.

Al otro individuo no le constaban antecedentes policiales, si bien uno de sus hermanos está estrechamente relacionado con el tráfico de cocaína en París, siendo la propia organización la encargada de introducir la droga en Francia en grandes cantidades.

Con el avance de las pesquisas, los agentes observaron numerosos encuentros entre ambos individuos tanto en España como en Francia y, por este motivo, se coordinaron las investigaciones a través de Europol --y posteriormente a través de Eurojust-- y se formalizó un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre ambos países para trabajar de forma conjunta a nivel policial y judicial.

Los agentes detectaron un aumento en el número de reuniones entre los investigados y varios ciudadanos franceses asentados en la ciudad malagueña de Marbella, algunos de los cuales eran «históricos miembros de la mafia marsellesa», han agregado desde la investigación.

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Entre los contactos observados encontraron a «un conocido criminal francés vinculado durante décadas al crimen organizado y al robo de bancos», que además había sido condenado en Francia por asesinar a un policía durante un robo.

Velero con 740 kilos de cocacína

En otoño de 2022 los investigadores observaron que la organización aceleraba los preparativos de lo que parecía una operación en marcha y advirtieron un incremento de los viajes del principal investigado en nuestro país para reunirse con sus socios venezolanos en diferentes puntos de España. Asimismo, viajaba continuamente a París, donde, junto a su hermano, visitaba un piso aparentemente vacío de en el que ambos metían y sacaban diversas cajas y bultos.

Al mismo tiempo, el primero de los investigados mencionados, que estaba asentado en París, adquirió, reparó y acondicionó un velero en Martinica para su navegación transoceánica. Fue en noviembre cuando este último individuo se desplazó a Martinica y, tras permanecer unos días y avituallarse, inició la navegación en solitario a bordo del velero.

Aunque había declarado como destino final Francia, el velero no tomó rumbo a Europa sino que navegó dirección sur y permaneció unas horas al norte de la zona de Isla Margarita, pero después modificó su rumbo e inició la travesía hacia Europa por la ruta de las Azores.

A pesar de las malas condiciones del mar, a finales del pasado mes de diciembre se activó a la Armada Española para que transportara a un equipo del GEO, junto a investigadores de ambos cuerpos policiales y de la Ofast, quienes interceptaron y abordaron el velero al oeste de las Islas Azores. En su interior localizaron 25 fardos de cocaína que arrojaron un peso total de 740 kilos de estupefaciente.

Asimismo, detuvieron a dos personas, tanto al primero de los investigados como a otro hombre venezolano que cumplía las funciones de «notario» y que había embarcado en el velero junto a la cocaína en Isla Margarita.

Tras la incautación de la cocaína en alta mar, los agentes explotaron la operación en tierra con detenciones y registros realizados de manera coordinada entre España y Francia.

En España se incautaron de 52.450 euros en metálico, dos armas de fuego localizadas en un domicilio de Salamanca, dos routers satelitales para embarcaciones, vehículos y múltiples terminales móviles, algunos de ellos con sistemas de comunicación encriptados.

Por otra parte, el piso de Francia donde habían sido vistos los hermanos, ubicado en el centro de París, resultó ser una guardería de estupefaciente donde se localizaron otros 345 kilos de cocaína y un arma de fuego. Además, en otros registros intervinieron 745.500 euros.

La operación, que ha finalizado con la detención de 15 personas --entre las que se encuentran los líderes de la organización, los encargados del transporte, los distribuidores del estupefaciente en Francia, financiadores, colaboradores más cercanos y representantes de la organización suministradora en España-- ha permitido la completa desarticulación de la organización criminal.