Una sucursal de Mercadona. | Maria Catany - MERCADONA - Archivo

Mercadona ha aumentado su beneficio neto en 2022 un cinco por ciento, hasta alcanzar los 718 millones de euros, y sus ventas han crecido un 11 por ciento interanual, hasta los 31.041 millones de euros, debido principalmente a la inflación.

De este total, 30.304 millones corresponden al negocio de España y los 737 restantes, al de Portugal, donde la evolución de las 39 tiendas con las que cuenta ha permitido elevar sus ventas un 77 por ciento más.

Así lo ha explicado este martes el presidente de Mercadona, Juan Roig, durante la rueda de prensa anual para presentar los resultados de la entidad en 2022. En este sentido, ha expuesto que Mercadona ha bajado en 0,6 puntos su margen de beneficios, lo que supone 140 millones de euros que no se han trasladado a los consumidores.

A lo largo de estos 12 meses, la compañía ha creado más de 3.000 nuevos puestos de trabajo, 1.000 de ellos en Portugal, lo que ha permitido cerrar el año con una plantilla de 99.000 personas, todas con contrato fijo.

Además, la entidad ha mejorado tanto el salario base como los complementos existentes del conjunto de su plantilla, lo que se ha traducido en una subida salarial acorde al IPC de cada país, concretamente de un 5,7 por ciento en España y de un 9,6 por ciento en Portugal.

UNA DE LAS RENTABILIDADES MÁS BAJAS

En 2022, la compañía ha trabajado para adaptarse al contexto del incremento de precios de la energía y de las materias primas, con el impacto consiguiente en el coste de los productos en origen, un 39 por ciento en el campo y del 20 por ciento en la industria alimentaria.

Con todo, para minimizar el impacto de esta inflación en los precios de venta al público, han puesto en marcha medidas para reducir los costes y multiplicar la eficiencia, lo que ha mejorado la productividad en un siete por ciento frente a 2021.

En este sentido, Mercadona ha señalado que han conseguido ahorrar más de 375 millones de euros en su conjunto, lo que se ha traducido en una reducción del margen en 0,6 puntos, que sitúa la rentabilidad de la compañía en una de las más bajas de su historia (0,025 euros frente a los 0,027 de 2021).

CONTRIBUCIÓN «HISTÓRICA» A LAS ARCAS PÚBLICAS

Mercadona ha realizado una contribución «histórica» a las arcas públicas de España y Portugal de 2.263 millones de euros, un 12 por ciento más.

En el desglose de esta contribución, destaca la partida del IVA, que ha crecido hasta los 418 millones de euros, un 26 por ciento más, o la del Impuesto sobre las Rentas Físicas de los trabajadores, de 443 millones de euros (también un 12 por ciento más).

Asimismo, la compañía ha incrementado su contribución directa un 13 por ciento, hasta los 390 millones de euros, y ha abonado un total de 240 millones de euros de impuesto de sociedades, un 22 por ciento más. También ha repartido con su plantilla la cantidad de 405 millones de euros, un ocho por ciento más.

El beneficio neto del grupo se ha situado en 718 millones de euros, lo que representa un incremento del cinco por ciento, prácticamente la mitad de lo experimentado por la cifra de ventas (11 por ciento).

Por último, la compañía ha avanzado que este año tiene previsto invertir 1.100 millones en 2023 para seguir impulsando su plan estratégico de formación, 280 de ellos en Portugal. Estos recursos se destinarán principalmente a la apertura de nuevos supermercados o a la construcción y reforma de sus bloques logísticos, para lo que creará más de 1.000 puestos de trabajo este año, entre España y Portugal.

UNA BAJADA DE LOS COSTES PARA ABARATAR PRECIOS DE VENTA

El presidente de Mercadona ha abogado por «perseguir» una bajada de los costes con el fin de abaratar los precios de venta al público (PVP). «Nos estamos enfrentando a escenarios ni imaginables ni previstos que han traído, entre otros factores, un importante incremento de la inflación», ha señalado Roig, quien ha asegurado estar muy preocupado por el aumento de los precios porque afecta más a las rentas más bajas.

A este respecto, durante la presentación de resultados de la compañía en 2022, ha señalado que Mercadona «ha hecho de dique de contención de precios, al ser capaz de poner en marcha numerosas medidas para reducir los costes y mejorar la productividad, con las que ha evitado trasladar parte del incremento de costes sufrido al precio final».

En este sentido, ha reiterado que «los precios de los productos que comercializa en sus lineales han subido un 10 por ciento de media, frente al incremento del 12 por ciento experimentado por los precios de coste en origen, dos puntos de diferencia que han incidido negativamente en el margen de la compañía, que ha sido 0,6 puntos menor que en 2021».

«Hemos conseguido paliar dos puntos que para nosotros es muchísimo, 600 millones, nos hemos dejado la piel para intentar paliar estos dos puntos», ha remarcado Roig, quien ha manifestado que en Mercadona están «muy preocupados por la inflación» porque afecta más a las rentas más bajas.

Roig ha reconocido, no obstante, que los precios de venta en los supermercados de la firma han subido «una burrada», como él nunca había visto, pero ha asegurado que la compañía se ha «dejado la piel» para repercutir menos costes a los consumidores y ser «dique de contención» entre la cadena de valor y el público. Según el empresario, si no se hubieran subido los precios, «el desastre de la cadena de producción hubiera sido impresionante».

Las declaraciones de Roig llegan el mismo día en que el INE ha publicado los datos definitivos de inflación de febrero. En concreto, el Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,9% en febrero en relación al mes anterior y elevó una décima su tasa interanual, hasta el 6%, por el encarecimiento de la electricidad, de los paquetes turísticos y de los alimentos, que dispararon sus precios un 16,6% respecto a febrero de 2022.