La plantación ocupaba una extensión de 5.000 metros cuadrados y era casi inaccesible, ya que para llegar a ella había que atravesar numerosos senderos escarpados y cortafuegos, según ha informado este viernes el instituto armado en un comunicado.
El responsable del cultivo, un ciudadano rumano que poseía una pistola municionada, fue arrestado y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Marbella por la supuesta comisión de un delito contra la salud pública y de tenencia ilícita de armas, que decretó su ingreso en prisión.
Los agentes que localizaron la plantación en el municipio de Istán comprobaron que contaba con un sofisticado sistema de riego que derivaba ilegalmente el agua, que era extraída de un río, hasta una balsa de 6.000 litros de capacidad fabricada al efecto.
La zona de cultivo de la droga contaba con dos zonas principales en las que se había transformado el suelo mediante la tala y corte de la vegetación y especies arbustivas autóctonas existentes.
Una de las partes se dedicaba al cultivo en hilera de las plantas y la otra era utilizada para el proceso de secado de la marihuana.
Debido al difícil acceso a la plantación fue necesaria la participación del helicóptero del Servicio Aéreo y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil, así como de un grupo de bomberos forestales especialistas del dispositivo Infoca.
Los bomberos llevaron a cabo la limpieza de la zona ante el elevado peligro de incendio forestal debido a los materiales inflamables que se encontraban en la plantación
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