Imagen del Hyneria. | JASON POOLE OF THE ACADEMY OF NATURAL SCIENCES OF

La recogida de fósiles durante 25 años en un yacimiento de Pensilvania ha permitido reconstruir el aspecto de 'Hyneria lindae', un predador acuático gigante que vivió hace 365 millones de años.

Aunque 'Hyneria lindae' se describió inicialmente en 1968, se hizo sin mucho material fósil para continuar. Pero desde mediados de la década de 1990, voluntarios, estudiantes y paleontólogos dedicados a cavar en el sitio de Red Hill han encontrado más y mejores fósiles del esqueleto de estos peces que han llevado a nuevos descubrimientos. Científicos de la Universidad de Drexel han publicado los resultados en el 'Journal of Vertebrate Paleontology'.

Este depredador del Devónico tenía un hocico grande y contundente, alcanzado entre 4 y 5 metros de largo, tenía ojos pequeños y presentaba un sistema sensorial que le permitía cazar presas al sentir ondas de presión a su alrededor.

No existe ningún esqueleto completo de este gigante, pero hay suficiente para mostrar que Hyneria realmente habría sido un monstruo para los otros animales en las corrientes subtropicales del Período Devónico, hace aproximadamente 365 millones de años. La boca de 'Hyneria' estaba erizada de colmillos de cinco centímetros. Como referencia, es más grande que la mayoría de los dientes del gran tiburón blanco actual.

Debido a su gran tamaño, armamento y capacidades sensoriales, 'Hyneria' puede haberse aprovechado de cualquier cosa, desde placodermos antiguos (peces acorazados), a acanthodes (relacionados con los tiburones) y sarcopterigios (peces con aletas lobuladas, el grupo al que pertenece Hyneria) --incluyendo Tetrápodos tempranos (vertebrados con miembros) que también se encuentran en el sitio estudiado--.

Dado que las corrientes en las que vivía Hyneria eran probablemente turbias y no conducentes a la caza por la vista, los canales sensoriales le permitieron detectar peces nadando cerca de ellos y atacarlos.

«Descubrimos que los elementos del techo del cráneo tienen aberturas en sus superficies que se conectan, formando una red de tubos que funcionaría como el sistema de línea sensorial en algunos vertebrados acuáticos modernos», afirma Ted Daeschler, autor principal del estudio. «De manera similar, encontramos una red de poros conectados en las partes de las escamas que estarían expuestas en el cuerpo de Hyneria».

Toda la nueva información recopilada sobre 'Hyneria' es doblemente valiosa porque proporciona más información sobre el ecosistema y el período de tiempo en que vivió. El Devónico fue un momento crucial en la evolución de los vertebrados, especialmente debido a que algunos de los peces con aletas lobulares de 'Hyneria' desarrollaron aletas especializadas que los llevarían a tierra y eventualmente darían lugar a todos los vertebrados con miembros, incluidos reptiles, anfibios y mamíferos.