Este nuevo tratamiento hormonal administrado por vía oral demostró una importante eficacia contraceptiva y la ausencia de efectos secundarios destacados o disminución de la de la actividad sexual. | Pixabay

El embrión de lo que puede convertirse con el tiempo y más ensayos clínicos en una nueva píldora anticonceptiva ha sido testado con éxito en un grupo de cien hombres sanos, según informa la Sociedad Endocrina norteamericana.

Según se han hecho eco varios medios especializados, este fármaco denominado 11-beta-MNTDC podría estar disponible en las farmacias en un plazo de unos 10 años, un recorrido considerable pese a los óptimos resultados de los primeros tests, que debe confirmarse en las dos fases posteriores del estudio.

En ellos este nuevo tratamiento hormonal administrado por vía oral demostró una importante eficacia contraceptiva y la ausencia de efectos secundarios destacados o disminución de la de la actividad sexual.

Se trata, según difundieron sus responsables en un encuentro científico en Nueva Orleans, de una testosterona modificada que tiene las acciones combinadas de una hormona masculina (andrógeno) y una progesterona.

Así, los resultados «sugieren que esta píldora, que combina dos actividades hormonales en una, disminuirá la producción de esperma al tiempo que preserva la libido», afirmó Christina Wang, investigadora principal y directora asociada del centro de Ciencia Clínica y Traslacional del Instituto de Investigación Biomédica de Los Ángeles (LA BioMed).

Las píldoras fueron administradas a los hombres en dos centros controlados durante un periodo de un mes. Como consecuencia la testosterona se redujo a un nivel promedio equiparable a la deficiencia de andrógenos, sin experimentar ningún efecto secundario grave.

Algunos de los participantes sufrieron efectos secundarios leves como fatiga, acné o dolor de cabeza, mientras que cinco informaron de una tenue disminución en el deseo sexual y otros dos describieron una disfunción eréctil leve, pero la actividad sexual no se redujo en ningún caso.

De este modo, según Wang, «la anticoncepción masculina hormonal segura y reversible debería estar disponible en unos diez años», predijo Wang.