Las multas relacionadas con la ITV pueden ser de cuatro tipos y ninguna de ellas conlleva la retirada de puntos.

La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es el control técnico que tienen que pasar los vehículos que vayan a circular por la vía pública cada cierto tiempo, dependiendo de la antigüedad y el tipo de vehículo, para comprobar que cumple todos los requisitos de seguridad y emisiones contaminantes.

De este modo, llegado el momento, es obligatorio pasar la ITV, tal y como se establece en el Real Decreto 2042/1994, de 14 de octubre, por el que se regula la inspección técnica de vehículos: «Los vehículos comprendidos en el ámbito de aplicación del presente Real Decreto se someterán obligatoriamente a la inspección técnica periódica».

Al estar regulado por ley, el hecho de llevar la ITV caducada puede suponer una sanción o multa económica. De hecho, si los agentes de tráfico encuentran un coche en un control que lleve la ITV caducada, se abre el proceso sancionador por el que se retira al conductor el permiso de circulación y se le entrega un volante con el que solamente puede circular hasta el taller para pasar la ITV.

Las multas por llevar caducada la ITV pueden ser cuatro y todas ellas son solamente de tipo económico, por lo que no se procede a la retirada de puntos del carné de conducir, tal y como informan desde la web de ITV.com.es.

En primer lugar, en caso de que no se haya presentado el vehículo en el plazo que ordena la ley, la multa a pagar es de 200 euros. Por otro lado, en caso de que la sanción se pague de manera inmediata, la multa desciende a los 100 euros.

Por otro lado, se puede dar la situación de que sí se haya llevado el vehículo a la inspección en el plazo indicado, pero se ha rechazado el vehículo a causa de que incumple las condiciones técnicas que garantizan la seguridad, es decir, por tener defectos muy graves que impiden abandonar la estación de ITV circulando por medios propios. Circular con la ITV negativa supone una multa de 500 euros sin posibilidad de descuento por pronto pago.

En caso de que se circule con la ITV desfavorable, habría que pagar una multa de 200 euros, que descienden a 100 euros si se paga inmediatamente.

Por último, habría una multa más a tener en cuenta, que se podría dar cuando, una vez superada la ITV, no se lleve la pegatina correspondiente en el parabrisas, lo que supone una sanción de 80 euros.