Esta semana, en la esquina de una avenida de la ciudad de Nottigham, en el centro de Inglaterra, apareció una pintada: junto a una bicicleta atada a una farola, se veía a una niña jugando al aro con lo que podría ser la rueda que le faltaba al ciclo. Por el estilo, todo apuntaba a que era obra del grafitero más famoso del mundo, Banksy. Ahora, éste lo ha confirmado.

En una publicación hecha este sábado, sin texto, Banksy ha compartido una foto de la pintada, situada en la esquina de las avenidas Rothesay y Lenton, en Nottingham.

Antes de que el artista confirmara su autoría, la obra había despertado una ola de admiración y numerosos curiosos se habían acercado a visitar y fotografiar la pintada. Después de que este sábado Banksy se atribuyera la obra, las visitas se han multiplicado.

En declaraciones a la agencia Press Association, la responsable de la peluquería en cuyo muro se ha hecho la obra, Surinder Kaur, afirma que «Todo el mundo está muy emocionado y mucha, mucha gente viene a ver el dibujo». «Lamentablemente, no soy dueña de esta propiedad, la estoy alquilando», afirmó. Las obras de Banksy están muy cotizadas y la simple presencia de una pintada suya puede revalorizar el inmueble.

La identidad de Banksy es secreta. Se sabe que es británico, nacido en 1974, ha publicado libros y ha producido una película, pero pese a varios intentos de la prensa por asignarle una identidad, ninguna se ha confirmado.