En el podcast de The Recovery, la cantante de The Fear, Lily Allen se ha sincerado sobre uno de los momentos más duros de su vida: cuando acompañó a Miley Cyrus en su Bangerz Tour 2014.

Tras haber «pasado los últimos años sacando bebés» y al sentir que Miley era más joven y guapa que ella, Allen terminó sufriendo problemas de autoestima que, finalmente, también afectaron a la percepción que tenía de su cuerpo.

«Tenía como 14 kilos y no me sentía una estrella del pop en absoluto, así que comencé a tomar esta droga llamada adderall, que es como la velocidad, para perder peso. Me volví adicta a esta droga porque me hacía invencible y podía trabajar muchas horas y ser todas las personas que debía ser fuera», comentó la cantante, confesando, también, que comenzó la gira por Estados como una manera de ganar más dinero tras el nacimiento de sus hijos.

«Luego terminé la gira por Estados Unidos apoyando a Miley Cyrus. Fue cuando ella estaba haciendo Wrecking Ball y la gira Bangerz y fue una gira altamente sexualizada. Había pasado los tres últimos años sacando bebés. No podría haber sido menos lo que sentía», añadió Allen.

Esta fue la primera vez que la cantante acompañó a otro artista en su gira. «Apoyaba a esta chica, que era mucho más joven y atractiva de lo que me sentía, y empecé a comportarme mal de muchas formas. Empecé a engañar a mi marido y siempre bebía mucho alcohol para aliviar las drogas. Luego me di cuenta de que me levantaba por la mañana y me tragaba esas mini botellas de vodka o whisky, lo que fuera, sin las drogas, nunca más».

«Pensaba: 'creo que tengo un problema con la bebida'», agregó la cantante. «Recuerdo estar en Los Ángeles y pensar: 'Ya nada de esta actuación funciona. Quizás debería probar la heroína'. Pero había vivido lo que les pasa a las personas que consumen heroína y, cuando ese pensamiento pasó por mi cabeza, supe que era el momento de confrontar mis demonios. Eso fue hace cinco años y comencé a recuperarme».

The Recovery busca «arrojar luz sobre las diversas dificultares y traumas que los invitados y el anfitrión han tenido que superar» y, anteriormente, había tratado temas como la adicción, la ansiedad y la sobreexposición a una edad temprana.