A la hora de trabajar con criptomonedas la seguridad es fundamental. Mantener nuestro propio equipo convertido en un fortín o una especie de caja fuerte de la que un activo valioso no pueda escapar es clave. Algo fundamental tanto si operas en plataformas de confianza como haces desde cualquier otra de las más conocidas. En todos estos casos existen amenazas externas que debes conocer y mantener bajo control.
Para que te sea más fácil identificar las aquí te damos algunas de las más habituales, con las que incrementar la seguridad de tus activos digitales.
1. Mantener el PC seguro
Mantener el dispositivo desde el que operamos seguro es el primer paso que debemos dar para ganar en seguridad a la hora de operar en criptomonedas. Un ordenador, móvil o tablet en el que no haya un antivirus, que no esté debidamente actualizado y que no utilice un firewall u otros elementos básicos de protección en Internet es un dispositivo vulnerable. Algo que se traduce en una puerta de enlace para que los amigos de lo ajeno puedan hacerse con su contenido, incluyendo nuestras criptomonedas.
2. Gestión de las contraseñas
El objetivo de las contraseñas es mantener segura nuestra cartera de criptomonedas, por lo que utilizarlas de forma correcta es algo fundamental. Este uso correcto implica el uso de palabras o claves que no sean fácilmente identificables por personas que nos conocen o que puedan acceder a nuestros datos personales. Por lo tanto, dichas contraseñas deberían ser complejas en su planteamiento, aunque accesibles a la hora de ser manipuladas y utilizadas.
En paralelo, es fundamental que mantengamos la máxima seguridad sobre dichas contraseñas, tanto para que no se filtren a terceros como para que no se nos olvide. Esto último puede parecer una tontería, pero son bastantes los casos en los que carteras con miles de euros en criptomonedas han pasado al olvidó por culpa de una contraseña olvidada.
3. Un exchange no es un almacén
Una plataforma de Exchange no es un banco en el que debamos depositar nuestras monedas, salvo que tengamos previsto realizar operaciones con ellas. Sin embargo, muchos usuarios confunden ambos términos. El resultado es que si el exchange en el que tenemos almacenadas nuestras criptomonedas sufre algún tipo de ataque, nuestros activos pueden desaparecer. Por supuesto, la posibilidad de que eso ocurra si estamos operando en una plataforma de criptomonedas fiable como Bitcoin Evolution app o Kraken es mucho menor. Casos famosos de estafas con criptomonedas son Mt Gox o Bifiniex, en los que se volatilizaron miles de bitcoins pertenecientes a sus clientes.
4. Phishing y otras tecnicas analogas
Muchas veces, cuando se habla de seguridad informática se dice que el mayor elemento de riesgo es el que se sitúa entre la silla y el ordenador, es decir el usuario. Por eso, también debemos extremar las precauciones a la hora de evaluar ciertos correos que podamos recibir o ciertos anuncios que podamos ver en la web. El mercado de las criptomonedas es muy jugoso y no son pocos los que crean páginas clonadas de otras legítimas para tratar de engañar y acceder a los datos de y contraseñas de los usuarios que tienen criptomonedas. Un contexto en el que el uso de una herramienta antimalware adecuada puede ser muy interesante, ya que también permitirá detectar posibles espías dentro del propio dispositivo.
5. Usa siempre conexiones seguras
A veces el problema no se encuentra dentro del ordenador, sino que este tiene que ver con la red de la que nos conectamos. Algo habitual cuando estamos fuera de casa, donde tenemos una amplia variedad de redes Wi-Fi disponibles para utilizar. Hablamos de lugares como aeropuertos, centros de convenciones, centros comerciales y otros grandes espacios públicos. Todas las redes Wi-Fi de estos lugares tienden a ser bastante peligrosas, tanto para nuestros propios datos personales como para nuestra cartera de criptomonedas, dado que la seguridad que se implementa en este tipo de redes es bastante modesta. Así que si tienes que hacer operaciones en criptomonedas fuera de casa lo mejor es que lo hagas utilizando tu propia red, la que tienes disponible en tu teléfono móvil o bien comprando un router 4G, que te capacite dicho acceso cuando no estés en casa.
6. Usa un monedero de hardware
Si la cantidad de criptomonedas que tienes en tu monedero es considerable, hablamos de la conveniencia de utilizar un monedero de hardware. Estos pequeños dispositivos tienen el tamaño de un pendrive tradicional pero cuentan con toda la tecnología necesaria tanto para mantener protegidos tus activos digitales como para facilitar su uso. Además, estos incorporan un sistema pensado especialmente para la seguridad, qué almacena las claves privadas dentro de un circuito impenetrable y que obliga a realizar un click manual para firmar las transacciones. Además, en caso de pérdida o robo también es posible bloquear el dispositivo para impedir fugas de activos.
7. Extrema las precauciones con las operaciones
A diferencia de lo que pasa con Bizum o con una transferencia bancaria, cuando se trata de realizar una transferencia de criptomonedas cualquier error implica perder el importe que hayamos enviado. Pensemos que los activos enviados no están vinculados a una entidad ni incluye ningún dato que permita identificarnos, por lo que no existe la posibilidad de revertir la operación. Por eso, es clave que a la hora de realizar este tipo de operaciones verifiquemos sobradamente que los activos que estamos enviando van dirigidos a la dirección a la que realmente los queremos enviar.
8. Ante todo, discreción
Nuestro último consejo es que, en la medida de lo posible, procure ser discreto respecto de tu cartera de criptomonedas. Al igual que hay personas que se dedican a ver en Facebook cuando la gente se va de vacaciones para ir a su casa a robar, también hay delincuentes que buscan personas que alardean de tener una buena cartera de criptomonedas para hacer lo mismo.
Obviamente, esto no va a afectar a quienes tengan un patrimonio valorado en apenas unos cientos de euros, pero sí a quienes cuenten con criptomonedas jugosas y caras o quienes tengan grandes cantidades de ellas. Así que procurar mantener la máxima discreción al respecto en cualquier ocasión en que se nos interpele por nuestro monedero de criptomonedas siempre es una buena idea.
