El tenista Rafael Nadal y su mujer Mery Perelló en una imagen de archivo. | Efe

Rafa Nadal y Mery Perelló podría vivir antes de que finalice el año 2022 una nueva jornada inolvidable, ya que podrían celebrar el bautizó de su hijo, que el pasado 8 de diciembre cumplió dos meses. El tenista no tiene compromisos laborales hasta el próximo 29 de diciembre, cuando participará en la United Cup de equipos mixtos. El manacorí tendrá que viajar a las ciudades australianas de Brisbane, Perth y Sídney, que albergarán del jueves 29 de diciembre al domingo 8 de enero de 2023 un certamen de equipos mixtos con 18 países en liza. Nadal estará al frente del combinado español junto a Paula Badosa, número 13 de la clasificación mundial.

Hasta ese momento, el prestigioso deportista tiene unos días de descanso, en los que podría aprovechar para bautizar a su hijo. Aunque la familia Nadal-Perelló es muy reservada para su vida privada y no suelen dar a conocer detalles de la misma, sí es sabido por todos el fuerte arraigo que tienen a su pueblo, por lo que podrían celebrar la ceremonia en la pequeña iglesia de Porto Cristo, la Mare de Déu del Carme. Otra de las especulaciones que se están formulando es que el pequeño podría recibir el sagrado sacramento de las manos de Tomeu Català, fundador del Proyecto Hombre, que llamó caso a Rafa y Mary en sa Fortaleza. Cabe precisar que se trata de suposiciones, ya que no hay confirmación oficial.

También se desconoce si Mary y el pequeño acompañarán al tenista hasta Australia, aunque es poco probable que lo hagan, debido a la gran distancia que existe. Madre e hijo sí acompañaron al deportista a Turín -se disputaba la Copa de Maestros-, concretamente el pasado mes de noviembre, cuando su primogénito sólo tenía un mes de vida. Nadal está muy ilusionado con su paternidad y no quiere perderse estos primeros momentos de su pequeño. Cabe recordar que en la previa del torneo Masters 1.000 de París-Bercy, reconoció que la distancia no es fácil. «Dejas a tu hijo en casa y sin poder verlo después de dos o tres semanas, cuando todavía apenas nos conocemos, y ya lo extrañas, es una nueva experiencia, pero todos los cambios son difíciles en la vida». En este punto, puso de manifiesto que gracias a los avances tecnológicos para poder seguir en contacto con su familia: «Ahora tenemos la suerte de que con la tecnología puedes hacer videollamadas y es algo que ayuda mucho».

Nuevo hogar en 2023

Otra de las novedades que esperan a esta pareja, ya de cara al año 2023, es un cambio de hogar. En este sentido, se espera que a partir de la próxima ejercicio puedan mudarse a la casa que se están construyendo en su adorado Porto Cristo.