Podemos no quiere turismo elitista. Dice esta formación política que hay que evitar la ampliación del aeropuerto de Eivissa para los jets privados porque, en su opinión, «es todo un símbolo de la apuesta por un turismo minoritario, elitisca, clasista, que da la espalda al grueso de la ciudadanía de Eivissa. El comunicado de Podemos, emitido el jueves, añadía que los jets privados consumen mucho combustible y que el objetivo final es transportar «solo a unos privilegiados». Evidentemente, la propuesta de Podemos ha recibido las críticas de la patronal ibicenca. La CAEB no entiende ahora la guerra de Podemos contra el turismo y la Federación Hotelera debatirá la cuestión en su próxima reunión. Evidentemente, existe preocupación entre el empresariado ibicenco, que tanto esfuerzo ha hecho en mejorar los establecimientos turísticos precisamente para captar turismo de calidad.

Irresponsable. Podemos sigue creyendo que está en la oposición, pero olvida fácilmente que es uno de los dos partidos que gobierna actualmente en el Consell d’Eivissa. Afortunadamente, existe sentido común y el Consell d’Eivissa ya ha dejado claro que no se opone a la ampliación del aeropuerto para que haya más cabida a los jets privados. En rueda de prensa, Viviana de Sans, vicepresidenta del Consell, tuvo que justificar como pudo la postura de Podemos. El jueves criticaba la ampliación del aeropuerto para jets privados; el viernes aceptaba la ampliación en el gobierno del que forma parte. Una gran incongruencia por parte de un partido que prometió hacer las cosas de otra manera, defender a ‘la gente normal’, pero en los pocos meses que lleva en el poder apenas ha dado muestra de esta nueva forma de hacer política.

La apuesta por el turismo. Podemos no puede ocultar la realidad y debe saber que muchos ciudadanos ibicencos hoy tienen trabajo gracias al turismo elitista que este partido, que se proclama «para la gente normal», detesta públicamente. Sería conveniente que Podemos aclarase si prefiere un avión cargado de turistas de mochila, de los que se emborrachan en algunas zonas turísticas de la isla por pocos euros. Es preocupante que un partido como Podemos, que tiene responsabilidad de gobierno, considere que sobran los turistas que aportan muchos cientos de miles de euros a la economía ibicenca.