El arranque de la legislatura ha generado dos noticias importantes. Por una parte, el acuerdo entre PSOE y Ciudadanos para elegir al socialista Patxi López como nuevo presidente del Congreso, una elección que fue posible gracias a la renuncia del PP a aspirar a este puesto. La segunda noticia fue la decisión de la diputada de Podemos Carolina Bescansa de acudir al primer pleno con su bebé, un gesto que provocó algunas adhesiones pero, sobre todo, muchas críticas. La legislatura ha comenzado con la irrupción de Podemos, pero sus propuestas son cada vez más preocupantes y no suponen ningún avance para desatascar la vida política nacional.

Patxi López. El acuerdo entre PSOE y Ciudadanos para elegir al socialista Patxi López para la presidencia del Congreso de los Diputados es un buen arranque para iniciar el clima de consenso entre las principales fuerzas políticas. Este gesto podría significar algún avance para elegir al nuevo presidente del Gobierno. No parece casual que el PP haya renunciado a presidir el Congreso. También es llamativa la radicalización de Pablo Iglesias, que tanto le da atacar al PP como al PSOE y convertir el inicio de la legislatura en un auténtico show. Muchos medios nacionales coincidían ayer en lamentar que Podemos no entiendiese que el Congreso no es un plató de televisión.

El bebé. Capítulo aparte merece la decisión de Carolina Bescansa de llevar a su bebé al hemiciclo, sobre todo cuando en el Congreso de los Diputados existe una guardería. Bescansa cree que con esta decisión se beneficia a la mujer, si bien parece más un gesto de cara a la galería, que posiblemente no se repetirá en lo que resta de legislatura. ¿Acaso piensa Bescansa acudir a los debates televisivos con su bebé a cuestas? ¿Va a estar el bebé de la diputada en todas las sesiones parlamentarias, de brazo en brazo? Lo más llamativo es que Bescansa acudió al Congreso acompañada por la persona que le cuida a su bebé. Un auténtico despropósito.