Con la conmoción que cabe imaginar entre el colectivo LGTB por la masacre vivida horas antes en un club gay de Orlando (Florida), trascurrió el pasado domingo la marcha del orgullo gay por las calles de Vila. Los organizadores tuvieron que decidir entre suspender el acto o proseguir tal como estaba previsto para honrar la memoria de las víctimas y porque la manifestación de la cabecera de la marcha cobraba en ese contexto más sentido que nunca: Stop homofobia y transfobia. Se optó por guardar un minuto de silencio tras la lectura del manifiesto con la presencia de las principales autoridades de la isla como el presidente del Consell, Vicent Torres y el alcalde de Vila, Rafa Ruiz.

Campaña. Pero como la campaña electoral no se detiene por ninguna matanza en Norteamérica y los hay dispuestos a aprovechar cualquier vicisitud para arrimar el ascua a su sardina, un destacado militante de Podemos que concurrió a las autonómicas como número 5 por Eivissa, Sergio Merlos, arremetió violentamente contra el PSOE por su presencia en la marcha del orgullo gay con una carroza propia. «Desalmados», «insensibles», «juego sucio», «deleznables», fueron algunos de los epítetos que dedicó a los socialistas a través de Facebook en una intervención que más tarde fue eliminada. «No han tenido miramiento ni tan siquiera con lo que ha pasado en Orlando», reprochaba Merlos. El diputado autonómico Salvador Aguilera acusó en Twitter al PSOE de colarse en la marcha «con carrera incluida y también caramelos del partido».

Oportunismo político. Se les pasó por alto que su candidato al Senado, Mario Devis, aprovechó un acto electoral en Sant Joan de Labritja para apropiarse de la Ley a favor de los derechos LGTB aprobada recientemente por unanimidad y lanzar críticas a algún obispo y por extensión al PP. Y ya de paso Artur Parrón reclamó la anulación del Concordato con la Santa Sede. Es increíble que Podemos se atreva a calificar de oportunista al PSOE. Oportunista fue lo que hicieron sus candidatos en Sant Joan, cuando llegaban las primeras noticias de la masacre de Orlando y no dudaron en utilizar tan sangriento crimen para lanzar críticas contra el PP.