En declaraciones a este periódico, el director insular de Turismo, Vicent Torres ‘Benet’, declaró que el Consell d’Eivissa tiene las manos atadas ante el problema de la vivienda que tantos problemas está creando en la isla. «Nos enfrentamos a la imposibilidad de demostrar que se hace un uso turístico y no residencial», declaró Torres en relación a la problemática de la vivienda vacacional, que es la causante de que no haya pisos para alquilar todo el año. Sin duda, un mensaje muy pesimista de la institución que debería liderar la solución a este problema.

Noticias relacionadas

Soluciones urgentes. Desde hace unos años se han conocido historias de personas que no han podido venir a trabajar a Ibiza porque no pueden vivir en un piso de alquilar. El problema ahora, además, es que hay familias enteras que deben marcharse de la isla en verano porque se ven obligados a desalojar la casa en la que residen durante la temporada baja, cuando no hay ni turistas ni los hoteles están abiertos. La confusión es máxima respecto a la legalidad o no de los pisos turísticos. El Consell asegura que debe cambiarse la Ley de Arrendamientos Urbanos para poder regular los pisos turísticos ya que la actual legislación permite el alquiler de una casa, por ejemplo, por una semana. Algunos juristas, como hoy mismo defiende Sergio Carrasco, niegan la mayor. Dice que falta voluntad política para frenar los alquileres irregulares, que recurrir a la LAU es una excusa.

El futuro. Sea como sea, las instituciones de Balears han demostrado su incapacidad para arreglar este problema, esta legislatura y la anterior, si bien antes el problema no era tan grave como ahora. Discuten sobre leyes, dan vueltas sobre normativas, pero no son capaces de dar una solución. Eso sí, algunos políticos no tienen ningún problema en acudir a manifestarse contra ellos mismos, que es lo que hizo el sábado pasado Viviana de Sans, responsable de vivienda del Consell y que quiso estar con los afectados por los alquileres. Mayor paradoja es imposible. Quizás ahora llegará el momento que tendrán que dar la culpa al Gobierno central. No falta mucho para ello.