Una encuesta elaborada por los comerciantes del puerto han confirmado las malas previsiones anunciadas en este periódico desde hace meses y que cayeron en saco roto en los despachos de Can Botino. Según los propios comerciantes, más de la mitad de los comercios de la Marina han visto caer sus ventas un 30 por ciento. Y casi el 45 por ciento asegura que no volvería a abrir su negocio en la misma zona, mientras que el 72 por ciento cree que el cierre al tráfico de la Marina y el puerto les ha perjudicado gravemente.

Flojos argumentos municipales. Al conocer la encuesta de los comerciantes, la reacción del Ayuntamiento de Vila sólo se puede calificar de sorprendente, con argumentos muy endebles. La concejala de Comercio, Gloria Corral, esgrimió que el perfil del turista que visita la isla llega en vuelos low cost, con poco dinero para gastar, con una estancia que no supera de media los cuatro días en los que, según Corral, no les queda mucho tiempo para las compras porque llegan a Ibiza con una maleta reducida que no les permiten llevar demasiadas cosas. En la ciudad de los yates de lujo, de los restaurantes y locales de alto nivel, ahora resulta que los turistas que llegan son turistas de alpargata. Y, sorprendentemente, el fenómeno se ha producido este año, con una caída de ventas del 30 por ciento.

Las soluciones. Nadie podrá negar que los comerciantes aportan soluciones a sus problemas. Por ello reclaman más aparcamientos, además de mejorar la limpieza, el eterno problema de la ciudad, y eliminar los puntos de venta de droga. Todos estos problemas son competencia del Ayuntamiento de Vila y no dependen de la aplicación de ‘ley de Montoro’, la excusa a la que siempre recurre el alcalde de Vila cuando surgen las críticas. Haría bien el Ayuntamiento en ponerse manos a la obra y solventar todos las quejas de los comerciantes. Han obviado las quejas desde el principio de verano y la solución del bus que recorre el puerto, de momento, no ha dado los frutos esperados. Aún tienen tiempo de arreglar las cosas. La Marina se merece una mayor atención del Ayuntamiento.