La encuesta electoral de Metroscopia dibuja un escenario político inédito en España tras las próximas elecciones generales, una convocatoria todavía incierta pero latente. Hasta cinco partidos de ámbito estatal y con una representatividad similar serán los responsables de conformar una mayoría suficiente para gobernar; una tarea compleja a la que se suma un nuevo actor: Vox.

La formación que lidera Santiago Abascal, junto con Ciudadanos de Albert Rivera, dan un enorme zarpazo electoral al Partido Popular de Pablo Casado. Por contra, el PSOE remonta posiciones aunque no las suficientes para neutralizar la previsible bajada de Podemos. Pedro Sánchez está logrando rentabilizar su paso por el palacio de la Moncloa.

Desplome del PP

Uno de los aspectos más sorprendentes del trabajo de Metroscopia es la caída del PP, que de los 137 escaños que tiene ahora pasaría a solo 68; una merma que nutre los espectaculares avances de Ciudadanos –de 32 a 70 diputados– y Vox, que de formación extraparlamentaria podría disponer de un grupo con 29 diputados. La polarización en el Congreso se consolida, con los extremos ideológicos de Podemos y Vox, aunque ello no necesariamente significa que no sea factible explorar nuevas alternativas y variantes al esquema actual. En este nuevo escenario el papel de C’s puede ser el factor que reequilibre la escena política española.

La izquierda, con ventaja

De confirmarse la proyección de Metroscopia, el PSOE se erigiría en la primera fuerza política española, una posición de ventaja importante a la hora de volver a formar Gobierno; más teniendo en cuenta las claras dificultades numéricas del bloque de la derecha para alcanzar una mayoría suficiente. El papel de las fuerzas nacionalistas e independentistas, de Catalunya y el País Vasco, se mantiene como determinante en la culminación de futuras investiduras. Los sondeos confirman el fin del bipartidismo.