Este jueves se cumplirán dos meses desde el incendio que asoló el pasado 21 de enero la sede judicial de Ibiza en Isidor Macabich. El edificio fue pasto de las llamas y, desde entonces, nada ha vuelto a ser igual. En la actualidad, los juzgados se reparten entre la sala habilitada en el Consell d’Eivissa y el Cetis y se está a la espera de que se puedan alquilar otros 400 metros más en esta última ubicación. Sindicatos y juez decano habían manifestado ya en más de una ocasión, y durante años, que las condiciones de trabajo en la sede de Isidor Macabich eran manifiestamente mejorables. Pese a ello, el edificio de Isidor Macabich había conseguido funcionar concentrado en una misma ubicación.
Justicia en suspenso.
El edificio quedó completamente inutilizado tras las llamas de la noche del 21 de enero. Desde entonces, los juzgados de lo Penal han tenido que suspender más de 160 juicios con una media de 30 señalamientos por semana. Son unas cifras preocupantes que se deben tener muy en cuenta y trabajadores y sindicatos auguran que estamos en la antesala de lo que será un «verano caliente» si no mejora la situación actual.
Nuevo edificio.
Justicia ha intensificado los trabajos en la obra de la futura sede judicial de Ibiza, ubicada en la antigua sa Graduada, con más empleados y con turnos de trabajo en fin de semana. El objetivo es volver a aglutinar la justicia en Ibiza en un mismo edificio y recuperar la normalidad, algo a lo que nadie se ha atrevido a ponerle una fecha concreta. La realidad es que los juzgados no pueden continuar dispersos y que los trabajadores judiciales no pueden seguir ejerciendo su labor como hasta ahora, literalmente codo con codo por falta de espacio. Ibiza no puede permitirse entrar de lleno en un verano sin una Administración de Justicia eficaz y que resuelva los problemas porque al final el principal perjudicado será el ciudadano.
