Ya se sabe que durante la campaña electoral los partidos políticos suelen hacer promesas electorales sin demasiadas posibilidades de convertirse en realidad. Otras, en cambio, se plantean iniciativas que no responden a ninguna demanda social ni empresarial, y que parece que lo único que persiguen es conseguir un titular llamativo y poco más. Este es el caso de la promesa de los socialistas ibicencos, quienes afirman que si ganan construirán un auditorio en el Recinto Ferial de 1.000 localidades, para que sea un referente del turismo de congresos y con el objetivo de atraer turismo de calidad en temporada baja.

La Casa de la Música.
Si se construye este auditorio, siempre y cuando gobiernen los socialistas otra legislatura más, deberá competir con el que piensa construirse en la Casa de la Música, que según el proyecto tendrá 500 plazas. Ibiza se convertirá en la ciudad española con más auditorio por metro cuadrado con el inconveniente de que la actividad turística se limita a apenas seis meses. Sin duda, una mala inversión para destinar dinero público en el futuro, teniendo en cuenta la escasez de aparcamientos subterráneos que hay en Ibiza, por ejemplo. Al final resultará que habrá más plazas en los auditorio que de aparcamientos, lo que no deja de ser llamativo.

Inversión costosa.
No hay nada que decir que el PSOE intente potenciar el turismo de calidad en Ibiza, y que para ello se utilice un espacio como el Recinto Ferial, pero convendría realizar propuestas que realmente cubran unas necesidades reales de los ciudadanos. ¿Acaso los empresarios de Ibiza son partidarios de este segundo auditorio? No conviene improvisar a la hora de hacer este tipo de propuestas, y menos el PSOE, que si se cumplen las encuestas gobernaría otra legislatura en el Consell. Las campañas no deberían convertirse en un zoco donde los políticos venden cualquier tipo de propuesta. Y ahora mismo el auditorio en el Recinto Ferial es un proyecto que está muy lejos de las grandes necesidades que tiene Ibiza. Y el dinero puede invertirse en cosas necearias, no en frivolidades.