El conseller de Turisme del Govern, Iago Negueruela, ha descartado que el reparto de los fondos de la ecotasa se haga en función de lo que aportan las islas. Dice Negueruela que no se puede entrar en este tipo de repartos ni discusiones porque el paso siguiente sería que los ayuntamientos quieran tener más voz en función del número de plazas hoteleras que haya en los distintos municipios. Por lo tanto, Negueruela quiere que todo siga igual y se ampara en un consejo donde teóricamente se pacta cómo se reparte el dinero de la ecotasa. Cabe recordar que en la última asamblea general de la patronal hotelera quedó patente que empresarios y Consell d’Eivissa coinciden en solicitar que lo recaudado se invierta íntegramente en la isla.

Poco consenso.
Estaría bien recordarle a Negueruela que Ibiza aporta más dinero a la ecotasa del que se reinvierte en la mayor de las Pitiusas. Evidentemente hay inversiones en la isla, como el proyecto de sa Coma, pero hay muchas más necesidades que no se ven colmadas por parte del Govern. Porque apelar a este consejo que decide cómo se reparte la recaudación de la ecotasa es una tremenda falacia. Desde su creación se ha hecho prácticamente lo que ha decidido el Ejecutivo balear en relación al impuesto. Basta preguntar a los hoteleros si están de acuerdo con algunas inversiones, y también a los ayuntamientos.

Más equitativo.
Evidentemente todas las islas quieren recuperar la mayor parte del dinero que se genera en sus territorios. Eso es lo lógico y Negueruela debería entenderlo, pero si el Govern pretende que el impuesto tenga una mayor aceptación social, que los hoteleros la consideren como un instrumento útil y de futuro, sería conveniente no cerrarse en banda y buscar una mayor equidad en el reparto de las inversiones. Y mucho más en las actuales circunstancias turísticas, con una bajada de ocupación hotelera cuyas consecuencias comenzarán a notarse progresivamente. Cuando las cosas vayan mal dadas la ecotasa volverá a ser cuestionada y por eso el Govern debería tener una posición mucho más flexible y buscar el consenso.