Ayer se esperaba que el Govern balear pusiera punto y final a la crisis del transporte aéreo sanitario anunciando que la concesionaria (Eliance) cumpliría por fin a partir de la semana que viene la oferta que le permitió llevarse el contrato millonario frente a otras competidoras. En el caso de Ibiza y Formentera, suponía que los vuelos del helicóptero del 061 que tan buen resultado han dado a la sociedad pitiusa y que reducen en parte los costes de la insularidad iban a ser operados por dos pilotos con la habilitación para volar en modo instrumental, esto es, de noche o con escasa visibilidad. La realidad, sin embargo, es que a día de hoy no hay fecha para que la compañía cumpla con el contrato, ya que los pilotos y la compañía seguirán sin estar habilitados para volar en modo instrumental durante bastantes meses más.

Dos pilotos mejor que uno.
Las denuncias de los sindicatos de pilotos, médicos y enfermeros no han caído, no obstante, en saco roto. Han servido al menos para que la opinión tenga conocimiento de los graves incumplimientos en los que está incurriendo la empresa. Asimismo, también han logrado que en lugar de un piloto, los vuelos del helicóptero se operen a partir de ahora con dos. Obviamente, la respuesta es menor del que habían esperado, pero mejora la situación anterior.

Las obras del aeropuerto.
Sindicatos y Govern son conscientes de que sustituir el avión ambulancia por el helicóptero como se ha venido haciendo en los últimos días no es compatible con las obras de la pista del aeropuerto de Ibiza que empezarán el 4 de noviembre, por lo que han optado por la vía del mal menor. Esperemos que no haya que lamentar ninguna desgracia que dé la razón a aquellos que han venido reclamando que pilotos y compañía puedan volar con todas las garantías y permisos en modo instrumental, es decir, de noche o con baja visibilidad. El Govern, además de exigir que la empresa cumpla, tiene la obligación de llegar hasta el final en el expediente de rescisión del contrato abierto.