Este diario ha ido publicando en la última semana una serie de datos escalofriantes sobre la ingente cantidad de agua potable que es desperdiciada por las fugas de las tuberías y un cruce de declaraciones del presidente del Consell, del Govern y de los responsables municipales. Lamentablemente, no hemos publicado ni una sola solución que permita pensar que al menos hay conciencia de la magnitud del problema y que hay un plan para acabar con el 30% de agua potable despilfarrada a plena luz del día y, lo que es más grave aún, de forma estructural. Hoy ofrecemos a nuestros lectores un nuevo dato que pone los pelos de punta y que dibuja la verdadera magnitud del problema: la cantidad que agua que se pierde cada año equivale a la capacidad de producción anual de la desalinizadora de Santa Eulària. Dicho con otras palabras, sin fugas en las tuberías no sería necesario arrancar ni un solo día dicha planta cuya construcción, por lo tanto, nos podríamos haber ahorrado.
Las fugas de agua, un atentado ambiental
15/12/19 4:01
También en Opinión
- El mar ‘se come’ la playa de ses Salines
- La desagradable sorpresa que encontró en su casa Dani Alves al salir de prisión
- Rachas de viento de hasta 113km/h en Ibiza
- El drama de la vivienda en Ibiza: se alquilan furgonetas y terrenos por 1.000 euros para trabajadores
- Nuevas modificaciones en los horarios de los ‘ferrys’ de Ibiza para este viernes