El portavoz del Govern y conseller de Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha informado de que las ayudas directas para autónomos y empresas de Baleares se podrán solicitar a partir del 14 de junio y aquellas que hayan sido concedidas se pagarán durante el mes de julio. Se refiere a las 855 millones de euros de las ayudas estatales que corresponden a las Islas del fondo aprobado el 12 de marzo por el Gobierno para inyectar liquidez y solvencia a las empresas más perjudicadas por la pandemia. El Gobierno se vio obligado a modificar, el 20 de abril, el decreto-ley para ampliar el ámbito de estas medidas. El primer decreto provocó un aluvión de protestas al excluir a numerosos sectores. En Baleares, entre otros, los fabricantes de calzado, los productores de queso, los empresarios de muebles, autónomos de peluquería, así como los cellers, centros de estética, floristería, tiendas de souvenirs, concesiones de coches y talleres de reparación al no figurar en la relación de epígrafes fiscales que permite obtener esta aportación estatal.

Fórmula porcentual que perjudica.
Ahora la patronal de la pequeña y mediana empresa denuncia un «reparto injusto y desproporcionado en favor de las grandes empresas de Baleares» de los 855 millones que repartirá el Govern. El presidente de PIMEM, Jordi Mora, afirma que «el Ejecutivo autonómico ha optado por una fórmula porcentual que provoca graves perjuicios a las pymes y microempresas». Al mismo tiempo pide que el reparto se haga mediante una fórmula nominal para que el pequeño tejido industrial de las Islas no sea discriminado.

Ayudas nominales, método habitual.
La advertencia de Jordi Mora no puede caer en saco roto porque las ayudas nominales han sido el método habitual del Govern para distribuir recursos y ayudas. Una segunda cuestión consiste en si resultará suficiente la cantidad asignada a Baleares para que las empresas del archipiélago -la comunidad más castigada por la covid- recuperen la liquidez y solvencia.