Julio concluye con sensaciones agridulces. Hasta que Reino Unido decidió colocar en ámbar a Baleares a partir del 19 de julio se estaba trabajando a buen ritmo en las Pitiusas. A partir del día 19 empezó una tendencia a la baja que si bien no ha sido muy aguda ha despertado las alarmas entre el sector turístico de Ibiza y Formentera. Y es que nadie quiere un fin de temporada precipitado como el del año pasado y, por ello, todos los esfuerzos han de centrarse en contener el crecimiento de los contagios con medidas de prevención y aumentar el ritmo de vacunación. A falta de los datos oficiales de la encuesta de ocupación hotelera de la patronal Fehif, se estima que la horquilla de ocupación de julio ha sido de entre el 45% y el 75%, según calcula la Asociación Española de Directores de Hotel. Para este mes, la AEDH calcula que podríamos estar un 15% por encima de los datos de julio.

‘Carrusel’ pandémico.

El sector turístico coincide en calificar de ‘carrusel’ la situación que se está viviendo en las Pitiusas, donde no sólo influye la evolución de los contagios en las Islas sino que también depende de cómo se está viviendo la pandemia en nuestros países emisores de turistas y, sobre todo, de las decisiones de política sanitaria que tomen en relación a los viajes de sus ciudadanos. En el horizonte de esta semana, una fecha clave que Ibiza está mirando con lupa: el jueves 5 de agosto, día en el que Reino Unido previsiblemente decidirá, si no lo hace antes, si coloca a Baleares y al resto de España en ‘ámbar plus’, lo que sí que podría significar un auténtico batacazo para la mayor de las Pitiusas ya que implicará que los británicos tendrán que hacer cuarentena al volver a su país aunque tengan las dos dosis de la vacuna.

La principal diferencia.

Las Pitiusas empiezan agosto con más de 3.000 casos activos. La principal diferencia con el resto de oleadas de coronavirus es que, en esta ocasión, hay vacunas disponibles. Si bien el número de contagios es considerable, no se está traduciendo en una mayor mortalidad ni en más ingresos hospitalarios porque los casos son más leves. La situación sigue siendo, sin duda, delicada pero muestra que estamos mejor que hace meses atrás. Por ello, hay que seguir apostando por la prevención y concienciar sobre la vacunación para así poder continuar teniendo temporada turística.