Un poco más de alegría.
La relajación de las medidas sanitarias, el retraso en la entrada del toque de queda y la reapertura del interior de los restaurantes, y las continuas noticias sobre las vacunas han insuflado optimismo en la población. Se percibe más alegría.

Las normas también se han de cumplir en las gradas.
Un pequeño sector de aficionados del San Pablo parece haberse olvidado de la crisis sanitaria y de que hay que cumplir con el protocolo COVID-19. Durante el derbi entre el Harinus Ibiza y el CIC San Pablo, alguno que otro se pasó todo el partido retirándose continuamente la mascarilla para que se pudieran escuchar sus protestas arbitrales. Es sólo un partido y de nivel aficionado. La vida de los que les rodean merece más respeto.

La negociación del ‘Brexit’ está pasando desapercibida.
En circunstancias normales y dado el peso que tiene el mercado británico en la economía de Ibiza, todos tendríamos una mirada puesta en las negociaciones entre Londres y Bruselas. Cuestión de prioridades.

La UD deja de ser líder absoluto de toda la Segunda B.
El empate a cero contra el Orihuela ha relegado a la UD Ibiza a la segunda posición de la clasificación agregada de toda la Segunda B, una tabla que únicamente tiene un valor indicativo, ya que carece de efectos prácticos. Ahora es segunda, empatado con el primero, el Badajoz, y el tercero, el Rayo Majadahonda. La Peña Deportiva Santa Eulària ocupa el puesto 77 de 98 equipos.

Carl Cox echa una mano.
El legendario dj Carl Cox se ha sumado al proyecto Ibiza Soul Food, iniciativa para recaudar fondos para el banco de alimentos. Cox pinchará en la primera sesión online el sábado, a razón de dos libras por asistente.