La presión vecinal funciona

Los vecinos siempre tienen razón. Cuando pedían una solución urgente en Talamanca, tenían razón. Cuando decían que Palma no prestaba demasiada atención al problema de Talamanca, tenían razón. Supongo que a la mayoría de mallorquines les costaría ubicar Talamanca en un mapa. Los vecinos también tenían razón cuando advertían de que los residuos que salían por el emisario podrían incumplir las normativas medio ambientales. No duden ni un minuto en que la presión vecinal encabezada por Josep Colomar y por los hoteleros han tenido parte de culpa en que ayer todas las partes implicadas pudiesen hacerse una foto en la playa de Talamanca. En este tránsito entre las presiones vecinales y la foto de ayer se han realizado muchas declaraciones desafortunadas y ha habido mucha demagogia por parte de todos los partidos políticos. Desde el equipo de gobierno hasta la oposición en Vila han priorizado la campaña electoral que en encontrar una solución. Me gustaría saber qué hizo el gobierno progresista que estaba en el Consell d’Eivissa la pasada legislatura para solucionar el problema de la depuradora de Vila y el emisario de Talamanca. Quizás aquí en nuestro mundillo sea un tema tabú meterse con Tarrés y su gobierno, pero no acabo de entender qué hicieron. Y si hicieron algo, que es posible, les presto estas páginas para explicarlo. En este episodio, donde Biel Company se tomó muy en serio solventar el problema desde el primer día, hay otro personaje que no ha aparecido en las fotografías pero que también ha presionado desde su puesto privilegiado como conseller. Se trata de José Vicente Marí Bosó, y evidentemente de Bauzá. Ahora solo falta que las obras de la nueva depuradora empiecen y se sustituya el emisario. Y decir alto y claro: ¡Viva las elecciones!