Siempre me ha llamado mucho la atención que a nuestros políticos les guste llenarse la boca con la difícilmente pronunciable palabra ‘desestacionalización’ y que luego no sean capaces de llevar a cabo acciones para conseguir poner en práctica y hacer realidad el tan ansiado deseo de alargar la temporada turística. Y precisamente esto me vino a la cabeza el sábado cuando me dirigía a la primera fiesta de la temporada de Children of the 80’s, en el Hard Rock Hotel de Playa d’en Bossa. Desde que la luz de las pistas de padel que hay justo en ese tramo de la calle dejó de iluminar nuestro camino, hasta que llegamos al sitio en cuestión no encontramos ni una sola farola encendida. Ni farola, ni nada que iluminara la calle, que, completamente a oscuras, daba una agobiante sensación de dejadez absoluta de toda la zona. Por lo que a la gente que se dirigía hacia la fiesta, que no era poca, no le quedó otra opción que, bien hacer uso de la linterna del móvil, o bien encomendarse a la suerte para no pisar en sitio poco adecuado y meter la pata en el sentido más literal de la palabra. Pues sí, estoy hablando del día 19 de marzo, con la Semana Santa a la vuelta de la esquina y sin ni una triste luz encendida, aunque solamente fuera porque la ocasión lo merecía. Incomprensible, teniendo en cuenta que me refiero a una de las zonas turísticas por excelencia de la isla. No quiero imaginarme cómo estarán otras zonas no tan turísticas. Tan negro como lo vi todo la otra noche, veo que algún día nuestros gobernantes consigan desestacionalizar la temporada y que los turistas se animen a venir a Ibiza con un panorama tan oscuro como el que tenemos en plena Semana Santa, porque no olvidemos que en muchos sitios de la Península muchos afortunados ya están de vacaciones. Menos mal que al llegar a la fiesta se hizo la luz porque como dicen Hombres G, yo a lo que iba era a pasármelo bien.