La calidad de nuestra enseñanza

Así, instado a mencionar algunos nombres de la Generación del 27, un alumno contestó que aunque «fueron veintisiete, sólo recuerdo algunos». Otros creen que la obra más importante de Cervantes fue «El Manco de Lepanto».

Otro aseguró que sinónimo de «ocaso» era «compañía de seguros», lo que dice mucho en favor del marketing de la compañía pero poco en el del alumno. Otro aseguró que el verbo es «un germen del que deriva la verborrea, una enfermedad venérea». Para alguno, la forma de un rombo es «uno: para todos los públicos. Dos: para mayores de 13 años. Tres: para adultos». Hay quien opina que la tangente es «por donde se salen los que no tienen razón» y otro cree que las paralelas llegan a tocarse pero «en el infinito, para que no las vean». Aníbal fue «un jefe cartilaginoso». El Cabo Kennedy está «en la tumba, porque lo mataron en 1963 cuando era presidente». El Benelux está formado por Bélgica, Luxemburgo y … el Neandertal. El ganado vacuno es, ¿cómo no?, «el que ha pasado la inspección de sanidad» y un fungicida es «uno que se suicida con hongos venenosos». Los Celtas fueron los propietarios de una conocida marca de tabaco. Atenas fue fundada por «César octavo a gusto» (!). Los coleccionistas de sellos son «sifilíticos»; el pediatra es un médico del pie y un cuadro de Velázquez: «Las Mellizas». Napoleón está enterrado en París y, por más señas, en «Los Paralíticos» y Méjico fue conquistada por dos extremeños: Menéndez y Pelayo.

Luego pasa lo que pasa. Pedro Sánchez de la Preveyéndola el Itinerante cree que D. Antonio Machado nació en Soria porque el nombre y la ciudad le evocan algo difuso. Otros proponen hacerse «una foto para la prosperidad» y hay quienes piensan que «La interpretación de los sueños» de Freud es obra «de astrólogos y brujas». Pablo Iglesias, que alardea de ser profesor de Ciencia política, afirma sin ruborizarse que hubo un referéndum de autodeterminación en Andalucía en los años ochenta del siglo pasado. Un tonto de guardia en una tertulia afirma, también sin ruborizarse, que «Vale», en latín significa «Hola» y ningún contertulio le corrige.

Un proverbio alemán «Ohne Fleiss kein Preis» lo explica certeramente: «Sin esfuerzo no hay recompensa» y hoy el esfuerzo es una virtud franquista de las que explican por qué Andalucía está a años luz de Madrid, Castilla y León o Navarra en materia educativa: por culpa de Franco, ¿cómo no?, coautor del pecado original y cómplice necesario del crimen de Cuenca.

Es prerrogativa de los ancianos no poder llegar a padecer, por razón de edad, el resultado final de la evolución de una sociedad en la que un día vivieron más o menos decentemente y que hoy va directamente a convertirse en una cloaca compartida y aceptada.