La líder de Podemos en Ibiza, Viviana de Sans, ha llevado a cabo esta semana un tour por diferentes medios de comunicación para explicar que el cambio en las maneras de hacer política prometido en campaña electoral ya es una realidad en el Consell d’Eivissa. Su vicepresidenta primera asegura que en año y medio Podemos ya ha conseguido teñir de color morado la máxima institución insular, donde ahora todo es más transparente, más limpio y ya nada huele a rancio PP. Apuntaba De Sans en la SER que su grupo es el que lleva la «batuta del cambio» en el Consell, que el nivel de transparencia había alcanzado «cotas altísimas», que el presupuesto en Benestar Social nunca había sido tan elevado, que en el modelo de transporte de la isla estaban llevando a cabo un «cambio radical» y que trabajaban «profundamente» en la transición energética para promover las energías renovables. Pues la verdad, no se nota. Cierto es que ahora sabemos cuánto dinero se gastan los consellers en sus viajes y podemos seguir los plenos por streaming, pero también lo es que las convocatorias a la prensa posteriores a los acuerdos del Consell Executiu cada vez son menos frecuentes y, por lo tanto, los consellers responden a menos preguntas. En cuanto al cambio radical en el modelo de transporte supongo que De Sans se refería a los numerosos cambios de propietarios de las empresas de autobuses, porque novedad no ha habido ninguna. Lo del presupuesto en Benestar Social suena a chiste porque, de ser verdad, a Lydia Jurado no le cunde demasiado. Y tildar de transición energética el comprar cuatro coches eléctricos me parece una tomadura de pelo. Si este es el listón que se marca Podemos, anam apanyats.