El Consell Insular ha desviado partidas de bienestar social para pagar al Consorcio Eivissa Patrimonio de la Humanidad (CEPH), así que destina 3,8 millones de euros para saldar la deuda que corresponde a las anualidades del año 2014 al 2017. La transferencia se ha realizado porque hay varias partidas que no dará tiempo a ejecutarse antes de que finalice el año en curso y, en caso de no llevarse cabo dicha operación, dicha cantidad acabaría en el remanente del presupuesto. Conviene recordar ahora que el 4 de diciembre de 1999 la UNESCO declaró el CEPH reconociendo la dimensión universal de algunos de los valores naturales e históricos que durante siglos han caracterizado a las Illes Pitiüsses, y uno de dichos valores es la ciudad fortificada de Dalt Vila. Entre los objetivos del Consorcio destaca promover iniciativas y proyectos culturales orientados a la conservación del patrimonio histórico.

De manera que propongo que parte de los 3,8 millones se destine a mejorar las subidas a la plaza de la Catedral, en concreto las calles empedradas parten del Ayuntamiento, del antiguo Seminario y del convento de las Monjas de Clausura.

Se trata de piedras resbaladizas y desgastadas a lo largo de los años, que ocasionan caídas a muchas personas que suben hasta la catedral. Y la solución es picar las piedras (buixardar), como hacía antes el Ayuntamiento y colocar pasamanos de hierro en algunas fachadas. Por otra parte, sugieren vecinos de Dalt Vila que habría de prohibir la circulación de vehículos pesados que originan problemas en la confluencia del Carrer de Sant Ciriac y el Carrer Major.

Por otra parte, a mi entender, el Ayuntamiento y el Consorcio deberían estudiar la posibilidad de organizar algún sistema de transporte que saliendo de Vara de Rey llegue hasta la plaza de la catedral. Sin duda, la solución es recuperar unos pequeños vehículos que en un pasado no muy lejano subían por las calles más difíciles de Dalt Vila.

Nuevas viviendas sociales

Es muy buena noticia que el Institut Balear de l’Habitatge (Ibavi) construirá pisos sociales y viviendas para funcionarios en unos terrenos situados detrás de la Comisaría de la Policía Nacional, en donde se levantarán 240 pisos destinados al alquiler social y a funcionarios del Ministerio del interior, propietario del solar con una superficie de 8.000 metros cuadrados.

Justo es recordar que el presidente del Consell Insular, Vicent Torres, escribió el pasado mes de marzo una carta reclamando la cesión del solar al ministro del Interior, José Ignacio Zoido, para construir viviendas para funcionarios. Un buen tanto se apunta, presidente.

Puestos a construir más alojamientos, pienso que sería muy deseable que el Institut Balear de la Salut (Ibsalut) levantara también una residencia para el personal sanitario que ejerce sus funciones en el hospital Can Misses, para que puedan vivir en pisos asequible y de acuerdo con los sueldos que perciben, Y es que si hay algo claro en la vida es que con la salud no se puede jugar.