Lamento decirlo pero que el Govern haya excluido a la TEF de las subvenciones de medios audiovisuales en lengua catalana no me sorprende lo más mínimo. TEF es un medio independiente, vivo, auténticamente ibicenco, y eso lo saben perfectamente en Palma. Cuando trabajaba en IB3 muchas veces los directivos analizamos el motivo de la baja implantación del canal autonómico en Ibiza y Formentera. Las Pitiusas eran la zona con menor audiencia en una etapa en que la audiencia sí importaba, y mucho, porque la audiencia reflejaba si conectábamos o no con el público. Al llegar a Ibiza entendí perfectamente el motivo: la TEF tenía la culpa. La televisión pitiusa era un medio que conectaba perfectamente con la sociedad de Ibiza y Formentera y ahí IB3, que se consideraba la televisión de los mallorquines, tenía poco que hacer. Pese a que Fanny Tur sabe perfectamente lo que estoy diciendo, su departamento ha excluido a la TEF de la línea de subvenciones para medios audiovisuales después de regar durante años y años con ayudas a revistas de pueblo que no leían ni los familiares de los redactores. Los argumentos que se exponen son ridículos. Porque el problema de la TEF es que llena 24 horas de programación con contenido diferente, variado, una parte en castellano, mientras los canales que sí serán subvencionados lo que hacen es repetir y repetir programas hasta el aburrimiento. Todos en catalán, por supuesto, pero con nulo interés para el espectador. Tengo la sensación de que el Govern se ha metido en un lío monumental y que ha cometido una gran injusticia, además de ningunear todo el esfuerzo que se ha hecho durante años por mantener una programación que los ibicencos consideran muy suya. Pero el Govern del que forman parte las ibicencas Pilar Costa y Fanny Tur ha valorado otras cosas: premiar a medios afines. Y eso se veía venir.