Habemus REB. El Gobierno del PSOE ha aprobado por Real Decreto y casi a punto de estar en funciones dada la convocatoria de elecciones generales anticipadas, el ansiado Régimen Especial para Balears (REB) que habrá de compensar los perjuicios y desigualdades que soportan los habitantes del archipiélago y también las empresas aquí radicadas, en evidente desventaja de su competitividad por mor de la insularidad. Se echa mano de un decreto gubernamental ya que el Ejecutivo de Pedro Sánchez, durante los nueve meses que lleva en el poder, no ha sido capaz de pactar un texto con el Govern de les Illes Balears, de su mismo color político y presidido por Francina Armengol, aprobarlo en Consejo de Ministros en forma de proyecto de ley, y darle curso parlamentario para su oportuno análisis, el correspondiente proceso de enmiendas en el Congreso y en el Senado, para su debate por todos los grupos políticos y para su votación final.

Se recurre al decreto, trámite reservado para cuestiones urgentes que uno no alcanza a apreciar aquí, por más que sea un tema muy necesario y ampliamente deseado por la sociedad balear. El REB aprobado ayer deberá ser convalidado por la Diputación Permanente del Congreso, órgano competente cuando las cortes están disueltas. ¿Los ciudadanos de Balears merecen un REB aprobado de este modo tan precario? Opino que no. Y además, nada justifica que se haga así. Sin embargo ningún partido ha alzado la voz para denunciar esto. Nadie quiere cargar con el estigma de oponerse a un REB. Es normal, aunque el PSIB lo hizo en 2015. Armengol lo recordará.

Balears está condenada a tener REBs descafeinados, decepcionantes, con recortes. Y aprobados al borde de comenzar la campaña electoral. Sucedió en abril de 2015 cuando el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó la reforma del REB para que José Ramón Bauzá pudiese presumir durante la campaña electoral de las autonómicas del 24-M. Pero ni por esas. Quien entonces era presidente del PP de Balears calificó aquello de «hecho histórico» que supondría un «salto cualitativo para nuestras Islas». Armengol habló de «oportunidad perdida». Ya ven. Ahora las tornas han cambiado y son los socialistas quienes utilizan los mismos argumentos que usaron los populares. Y es que si este mismo REB que tanto satisface y enorgullece al PSIB, lo llega a aprobar Rajoy, dirían pestes. Así estamos, los unos por los otros la casa sin barrer.