Cuenta la leyenda que tres meses antes de elecciones municipales emanan inexplicables energías telúricas del Ayuntamiento de Sant Josep. Testimonios de vecinos aseguran haber sentido inusuales vibraciones denotando una actividad frenética en el consistorio, algo tan inusual como difícil de creer. Pero así es.

Unas voces de ultratumba repiten incesantemente: «Vamos, hay que darse prisa y trabajar, que tan sólo quedan tres meses para las elecciones».

Estos días en el pueblo ha habido una serie de apariciones que los vecinos aseguran no habían visto hacía cuatro años. Algo increíble. Los grafitis ‘chapuza’ que adornaban desde tiempos inmemoriales el núcleo de Sant Josep, han desaparecido (con una capa de pintura, eso sí, todavía se transparentan). De repente unos obreros con chalecos amarillos fluorescente trabajando, una zanja enorme que recorre toda la calle, acordonada de cintas con colores bien visibles. Sí, que todo el mundo vea el gran y buen trabajo que se hace en el municipio y lo bien que se invierten los impuestos de los «josepins».

Pero no os dejéis engañar, son los efectos del ‘Fantasma de las Elecciones’. Estas energías únicamente tienen como duración los tres meses previos a las elecciones. Por tanto se tiene que trabajar a destajo en este tiempo todo lo que no se ha realizado en los últimos cuatro años. Todo sea por intentar conseguir un puñado más de votos.

Lo mejor es que después de las elecciones todo volverá a su estado normal, o sea, relax, pasotismo, muchos cafés y poco trabajo. Mientras, el resto del municipio seguirá con las graves deficiencias y abandono de siempre; ruido, mala calidad del agua, falta de infraestructuras, etc.

Mucha suerte en las próximas elecciones locales a todas las demás personas que encabezan una candidatura, recordando que «por sus hechos los conoceréis» y no por sus vacías promesas electorales envueltas en buñuelos. Recuerden, las palabras se las lleva el viento.
Mos estimam Eivissa.