En el día de ayer, dos embarcaciones más llegaron a las Baleares, una a la zona es Cubells y otra a la isla de Cabrera. En la que llegó a Ibiza se «arrestaron» a 11 personas. Algunos de ellos tendrán la ‘suerte’ de ser ‘hospedados’ en alguno de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) peninsulares, ya que el Delegado de Gobierno aseguró que ahora ya se disponen de plazas libres en estos ‘acogedores alojamientos’, a diferencia de lo que le sucedió a los migrantes llegados el jueves 26 de diciembre, que quedaron en libertad por falta de plazas. Este 31 de diciembre PSOE y Unidas Podemos presentaron su acuerdo de gobierno de «coalición progresista», en el que no se hacía mención al futuro que le depara a los CIEs. En el, sí que se hablaba de que el nuevo gobierno, salido del próximo debate de investidura, «promovería una política europea de inmigración justa y y solidaria a través de la articulación de vías legales y seguras, que respete los derechos humanos y garantice las libertades y principios de la UE para todas las personas». Ese mismo día por la tarde, frente a las puertas del CIE de Zapadores de València, decenas de manifestantes, convocados por la plataforma CIEs No, se manifestaron para exigir su cierre. Migrantes y organizaciones sociales demandan desde hace tiempo el cierre de los CIEs por agresiones a los migrantes, aislamientos o falta de atención sanitaria. Este 23 de diciembre, un interno del CIE de Zapadores denunció una agresión por parte de la Policía Local, durante un traslado al hospital. El caso más extremo fue el 15 de julio, Marouane Abouobaida, de 23 años, se suicidó tras haber sido recluido en una celda de aislamiento, por verse implicado en una pelea entre internos. Muerte por la que Marlaska tiene pendiente una comparecencia en el Congreso, que evitaron las elecciones de noviembre. Así que, quizás, antes de pedir el respeto a los derechos humanos a nivel europeo, Sánchez e Iglesias deberían preocuparse por cumplirlos en el mismo territorio español.