Los gobiernos tienen miedo de Internet. | Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

Un reciente informe sobre la libertad en la red publicado por la ONG Freedom House, el control digital ha aumentado por undécimo año consecutivo. Los mayores deterioros se documentaron en Myanmar, Bielorrusia y Uganda, donde las fuerzas estatales reprimieron en medio de crisis electorales y constitucionales. Según esta institución, «en la batalla de alto riesgo entre los estados y las empresas de tecnología, los derechos de los usuarios de Internet se han convertido en las principales víctimas.» Un número creciente de gobiernos, denuncian, «está afirmando su autoridad sobre las empresas de tecnología, a menudo obligando a las empresas a cumplir con la censura y la vigilancia en línea».

La libertad de expresión en línea, añaden, está sometida a una tensión sin precedentes. ¿El motivo de esta tensión? Desde Freedom House apuntan que «más gobiernos arrestaron a usuarios por discursos políticos, sociales o religiosos no violentos que nunca; los funcionarios suspendieron el acceso a Internet en al menos 20 países y 21 estados bloquearon el acceso a las plataformas de redes sociales; y se sospecha que las autoridades de al menos 45 países obtienen software sofisticado de software espía o tecnología de extracción de datos de proveedores privados».

La conclusión que sacamos de todo esto es que todos los gobiernos tienen miedo de Internet. Además, con el pretexto de la crisis sanitaria de la Covid-19, gobiernos de todo el mundo han ocultado información. ¿O es que a día de hoy sabe cuántos muertos ha causado la pandemia? O recuerden la Proposición no de Ley presentada por Unidas Podemos para «prevenir la propagación de discursos de odio en el espacio digital».