Una imagen de la fachada de una sucursal de Correos. | EUROPA PRESS - Archivo

Las necesidades de la sociedad de hoy no son las mismas que cuando Correos se creó hace ya más de tres siglos. Pero la razón de ser de la compañía sí que sigue siendo igual desde el día de su fundación: servir a la ciudadanía y facilitar su día a día. Por ello, Correos innova continuamente para adaptarse a las demandas de nuestra sociedad, mejorar los servicios que provee y garantizar la solidez de la compañía.

Este proceso de transformación gira en torno a tres ejes: la diversificación de servicios, la internacionalización y una mejora de la eficiencia. Todo ello manteniendo la calidad del servicio a la ciudadanía y con un empleo estable y de calidad, sin ningún plan de privatización ni proceso de despidos. Gracias a esta transformación, Correos ha hecho frente a la caída del postal (500 millones de envíos menos en 2019), agravada por la posterior crisis sanitaria de 2020.

Correos es además el operador designado por el Estado para prestar el Servicio Postal Universal (SPU) a todos los ciudadanos y ciudadanas, en cualquier punto del territorio. La compañía garantiza su prestación en las mismas condiciones de equidad, accesibilidad, asequibilidad y no discriminación que establece la Ley 43/2010 del Servicio Postal Universal, de los Derechos de los Usuarios y del Mercado Postal (art. 1,2, art. 2 y art. 22.1).

Correos cuenta en Baleares con 67 oficinas informatizadas, 42 servicios rurales en las islas y durante el último año se han realizado 24 proyectos de mejora en centros de trabajo de Baleares. La compañía postal también dispone en las islas de 38 unidades de reparto que este año han sido dotadas con 476 nuevos dispositivos portátiles con mejores prestaciones para su plantilla de reparto en las islas.

La adecuación de la estructura de distribución para ser más eficientes, sin merma de la calidad, es una obligación como operador público. De hecho, la compañía sigue avanzando en la digitalización de los 2.295 puntos de atención al público de que dispone en zonas rurales. Estas oficinas quedarán totalmente digitalizadas y conectadas a los sistemas de Correos, y podrán facilitar el acceso de la ciudadanía a todos sus servicios en igualdad de condiciones que en las zonas urbanas más pobladas.

En lo que se refiere al empleo de calidad, Correos considera que es el mejor instrumento para garantizar la prestación del servicio, con la máxima calidad a toda la ciudadanía y, al mismo tiempo, contribuir al desarrollo de la sociedad con empleo estable. Por ello, durante 2020, un total de 4.005, 82 de ellos en las Islas Baleares, se incorporaron como trabajadores fijos en la compañía en el marco del proceso de consolidación de empleo temporal. En el septiembre pasado, se realizaron las pruebas para el ingreso de personal laboral indefinido (3.381 provenientes de la convocatoria de 2019) de las cuales 79 se incorporarán a la plantilla próximamente en las Islas.

Actualmente está abierto un nuevo proceso de consolidación de 3.254 puestos de trabajo de la convocatoria de 2020 y el pasado mes de noviembre se publicaron las Bolsas de Empleo para la cobertura temporal de puestos en los periodos de máxima actividad en toda España con más de 60.000 candidatos admitidos, lo que demuestra el atractivo laboral de Correos. De estos 60.000 candidatos, 4.000 pertenecen a las Islas Baleares.

Más allá de su actividad de negocio, Correos mantiene un sólido compromiso por paliar el problema de la despoblación y contribuir al desarrollo del mundo rural. Acciones que se articulan mediante la digitalización e incorporación de nuevos servicios en las oficinas rurales, las iniciativas para luchar contra la exclusión financiera o el apoyo a los productores y pymes locales.