Cambiemos el nombre a Formentera

Parece ser la masificación y la codicia las causantes de dicho zarandeo el cuál se combate a base de prohibiciones.

Prohibir sin más, no parece difícil , no requiere de mucho esfuerzo por parte del ejecutor. En cambio prohibir dando alternativas y soluciones requiere de un esfuerzo que nadie quiere asumir. Es la sofisticación ,el punto de gracia a la prohibición , pero nadie parece haber nacido con ese dón. Y es que vivimos en un mundo lleno de incongruencias , donde nuestro presidente se quita la corbata par combatir el precio de la luz. No se si serán males de izquierdas y es que aunque me repita mas que el ajo , no puedo más que hablar del puerto y s’Estany des Peix .

Estamos en plena regulación de s’Estany des Peix dirigida por los altos mandos. Aquí el objetivo es claro. Dar fin cuanto antes a dicha regulación , incluso antes de dar alternativas, como rampas y zonas accesibles en el puerto. Los días pasan con gran rapidez y las elecciones cada día están más cerca. Y es que hay una medalla en juego y que todo mando quiere lucir en su uniforme. Dicha medalla lleva impreso «NOSOTROS REGULAMOS S’ESTANY DES PEIX». Por dicha medalla o Dios sabe porqué , todo el pelotón tiene órdenes claras de seguir adelante con dureza, sorteando obstáculos y sin parase a mirar las consecuencias. El objetivo es claro y nada se puede interponer en el camino.

Cuánto daría para que se aplicaran ese eslogan hippie que dice haz el amor y no la guerra y empezaran a mirar a cuanta gente y empresas pueden salvar.
Los puertos están dejando de ser para la clase media y no hay manera de lidiar con autoridad portuaria .Pero estos mandos no acostumbran hacer cola en la puerta de la farmacia para comprar ibuprofeno, tampoco se levantan a media noche para comprobar que son las tres y no han conseguido dormir , y no acompañan cada cucharada con un vaso de agua y es que estos asuntos no les dan demasiado dolor de cabeza y no les quitan ni el hambre ni el sueño.

A medida que la clase media va desapareciendo , daremos paso , al eres rico o trabajas para él . Esos ricos que tanto aman las grandes motoras que acostumbramos a ver cuarenta nudos arriba, veinticinco abajo, treinta y siete a babor y treinta a estribor. Esos si saben zarandear el mar y la isla.

Estamos siendo atacados por muchos frentes y la guerra esta siendo muy dura. Todos queremos remar en la misma dirección, al fin y al cabo todos tenemos el mismo ADN , mandos, soldados y ciudadanos de a pie. Estamos todos en el mismo barco y sabemos donde queremos llegar pero entre tanto miedo y confusión, unos clavan el remo de proa a popa y otros al revés, generando caos y malgastando esfuerzos. Así será casi imposible llegar a buen puerto y empresas morirán en el camino. Por lo que la solución más coherente será cambiarle el nombre a la isla.

Solo queda felicitar todos los agraciados con un amarre en el lago y desearles que lo puedan disfrutar por muchos años y por otro lado acompaño en el sentimiento a todos los expulsados. Visca Formentera.