Javier Torres.

Todas las encuestas pronostican la desaparición de Ciudadanos (Cs) en todo el país. Aseguran que lo más probable es que no logren votos suficientes para obtener representación en las principales instituciones donde consigan presentar una lista electoral, algo que, además, en Ibiza serán muy pocas. Así, sus perspectivas para las elecciones municipales del próximo 28 de mayo son pesimistas. Por eso, algunos se han pasado a otros partidos, singularmente al PP, aunque la mayoría han tirado la toalla y se retiran de la vida pública. Los que pugnan por seguir en la política activa en Cs son gente con más moral que el Alcoyano. Ahí tenemos a Javier Torres, vicepresidente 2º del Consell d’Eivissa y coordinador de Cs en las Pitiusas (un cargo algo presuntuoso porque en Formentera son inexistentes y hay poco que coordinar). Se ha coaligado con un partido nuevo con nombre de grupo musical de versiones, de los que actúan en los hoteles del Inserso, Sa Veu des Poble. Torres encabezará la candidatura a la alcaldía de Sant Joan de Labritja por la coalición formada por Cs y Sa Veu des Poble. Teniendo en cuenta que Torres no vive en el municipio y que Cs consiguió en 2019 sólo 42 votos en las municipales y 126 en las generales, no parece que pueda aportar mucho. Para salvar ese insalvable hándicap, últimamente se muestra como un opositor hiperactivo, por más que está gobernando. Se le habrán subido los humos de tanto mandar, porque ahí le vimos, presentando seis autobuses usados como si fuesen nuevos, como si los hubiese pagado él y los hubiese construido él con sus propias manos. A punto de culminar su mandato como conseller de Transportes, no vemos ni un autobús nuevo. Y ninguno de los usados va a Sant Joan. ¡Qué torpeza! Imperdonable.