Rafa Ruiz será imputado en el «caso Puertos». El PSOE de Ibiza sufrirá un nuevo varapalo judicial que les complica la contienda electoral y supone una enmienda a la totalidad de la estrategia de campaña. Agustinet fiaba sus escasas opciones para usurpar el Consell d’Eivissa al caso «La vida islados» por el que declarará Vicent Marí el próximo mes de junio. Tras cuatro años de oposición inexistente y con este frente como única baza, esperaban tumbar al de Santa Eulalia con su mera declaración en calidad de investigado. Montar esta operación ha requerido a los socialistas la connivencia de una absurda e inoperante Oficina Anticorrupción y una fiscalía al servicio del partido. Pero la titular del Juzgado de Instrucción n°3 de Palma, Martina Mora, ha puesto a Armengol y sus lacayos contra las cuerdas al imputar al hermano de su candidata al Parlament, Pilar Costa y, en breve, al alcalde de Ibiza. Esta inminente imputación de Ruiz se suma a la de Aída Alcaraz (n°4 de los socialistas al Consell) y Cristina Ribas (n°3 del PSOE a Sant Antoni). De este modo, el partido queda completamente desacreditado e inhabilitado para dar lecciones de nada o exigir responsabilidades a nadie. Todo el ruido y sobreactuación que han fingido hasta ahora queda en agua de borrajas. Antes de disparar, Agustinet debería haber previsto el daño que le producirían los muertos que esconde en el armario. A su izquierda, PODEMOS y lo que queda de Izquierda Unida guardan silencio para no soliviantar a sus amos socialistas, no vaya a ser que peligre el cargo y, con ello, el sueldo.

Se acerca mayo y, con ello, se estrecha el margen de reacción de un PSOE que no ha sabido atinar ni con sus candidatos, ni con su estrategia de campaña. El futuro de Armengol se juega en Vila y Palma.