Alumnos de Secundaria de los institutos Isidor Macabich, de Vila, y Quartó de Portmany y Sa Serra, de Sant Antoni, se han reunido este miéroles en el Auditorio Caló de s’Oli para celebrar la clausura del proyecto de ‘Aprenentatge i Servei’ (APS) y, así, compartir sus trabajos de divulgación con el resto de equipos. Una iniciativa pionera en este curso que ha contado con la colaboración del Club Nàutic Sant Antoni y la asociación Salvem sa Badia de Portmany. En este sentido, ambas entidades facilitaron a los centros educativos participantes un amplio programa educativo para concienciar y desarrollar iniciativas ambientales de mejora de la bahía.

Sin ir más lejos, desde el Club Nàutic Sant Antoni organizaron varias visitas para que estos estudiantes descubrieran grandes aspectos de la biodiversidad marina. «Hicimos varias rutas caminando y en barco. Hemos investigado sobre la importancia de los islotes», explicó María, alumna del instituto Isidor Macabich, mientras resaltaba que los islotes son zonas de refugio para las especies animales y están protegidos por su gran biodiversidad.

Este proyecto educativo, en el que han estado trabajando todo el curso, lo han explicado este miércoles a través de una reflexiva interpretación teatral en el Auditorio Caló de s’Oli. «Queremos presentar este proyecto divulgativo en el Ayuntamiento. Para ello, hemos creado una web y hemos desarrollado la ruta que hicimos», subrayó María junto al resto de integrantes del equipo Miriam Marta, Tanit, Hugo y David.

Amenazas y debilidades

Por su parte, los alumnos del instituto Sa Serra descubrieron en una de estas visitas organizadas cómo es la navegación sostenible y sus diferencias respecto a la navegación convencional. Iniciativas que, según Enrique Más, director técnico del Club Náutico, permitieron ver a los alumnos las amenazas y debilidades de la situación medioambiental de la bahía. «Estos jóvenes son conscientes de todos los elementos que destrozan la biodiversidad. Han sido testigos de cómo el fondeo ilegal y el tráfico náutico, con sus vertidos de aguas sucias, están destrozando la posidonia», explicó Enrique resaltando que todos los equipos han hablado en sus proyectos de las praderas de posidonia oceánica, «puesto que son gran importancia para el equilibrio de los ecosistemas marinos».

Asimismo, ha explicado este miércoles a Periódico de Ibiza y Formentera que estos trabajos educativos han constituido un gran reto ambiental para todos estos estudiantes. «Cada proyecto aporta soluciones con el objetivo de recuperar el equilibrio natural de la bahía», apuntó Enrique haciendo hincapié en que esta asignatura optativa de formación sobre la Bahía de Portmany se ha centrado especialmente en sus valores ambientales, paisajísticos y etnográficos.

Por su parte, Marta Fernández, técnica ambiental y educativa de Es Nàutic, indicó que es la primera vez que Ibiza acoge este tipo de iniciativas ambientales, puesto que en Baleares sólo se había desarrollado un proyecto con metodología APS y había sido en la Serra de Tramuntana de Mallorca. «Desde el Club náutico hemos ofrecido una batería de actividades para los alumnos como la navegación marítima o la demostración de cómo era la profesión de farero, puesto que antes era el único medio de apoyo a la navegación. Hemos intentado transmitirles que la bahía es un espacio frágil y que es esencial respetar la naturaleza», subrayó.