Virginia Marí, encaramada en el muro que circunda la Plaça Espanya de Dalt Vila, justo después de contestar a las preguntas de este periódico.

Los funcionarios que nos encontramos camino de la plaza donde se desarrolla la entrevista le hablan como si fuese una vecina de toda la vida. Virginia Marí Renesson pasea una naturalidad no exenta de contundencia. Tal vez sea por el carácter heredado de su padre (Antoni Marí Calbet), tal vez por el origen vikingo que sugiere su segundo apellido.

—He tardado 20 minutos en llegar desde la rotonda de la Blanca Dona hasta aquí, y estamos en mayo...

—Tenemos un problema de movilidad. Precisamente hoy (ayer para el lector) he estado hablando con el jefe de movilidad para que estudie la posibilidad de hacer una pequeña rotonda en el cruce entre la Avinguda Santa Eulària, Bartomeu Rosselló y el puerto, que podría ayudar a descongestionar parte del centro. La solución pasa por varias medidas, como por ejemplo el sistema de control electrónico de la zona azul, que irá informando de las plazas vacantes, o los parkings disuasorios; ahora mismo hay tres proyectados, pero habilitaremos más. Por otra parte, hay que plantearse seriamente cerrar Vara de Rey al tráfico; no sé si en ambos sentidos o en uno, son los técnicos los que tienen que decidir la mejor opción.

—Asegura el candidato del PSOE a la alcaldía, Rafa Ruiz, que, de cada diez ciudadanos con los que habla, nueve señalan la suciedad como el principal problema de Vila...

—Y es verdad. Llevo tiempo diciendo que la ciudad está sucia. Tenemos una contrata que está pensada para la mitad de la población de la que hay ahora. En un mes espero que esté licitada la nueva.

—¿Se ve capacitada para abrir el Cetis? ¿En cuánto tiempo?

—Si hay voluntad política por parte de todos, se puede abrir pronto. Espero que la resolución judicial esté lo antes posible. Cuando veo a la gente esperando el autobús enfrente de la antigua Delegación de Gobierno se me cae la cara de vergüenza.

—¿Para cuándo la substitución de emisario de Talamanca?

—Confío en que tengamos el nuevo para la temporada que viene.

—Le podría preguntar por el PGOU anulado y por la redacción del nuevo, pero se lo voy a poner más fácil: ¿Vila puede crecer más?

—No, la ciudad ya no puede crecer más. Tenemos el suelo que tenemos. Lo que necesitamos son más zonas verdes; más parques y espacios para el ciudadano.

—Usted quiere activar las juntas municipales. ¿De verdad van a decidir los ciudadanos las prioridades de su barrio?

—Yo creo que sí. Eso no significa que se vayan a solucionar todos los problemas. Jamás prometo lo que no puedo cumplir, pero las prioridades las van a decidir ellos.

—Ha elaborado una candidatura pensada para gobernar. Si al final no es alcaldesa, ¿Álex Minchiotti, Lourdes Cardona o Joan Tur Ripoll se van a quedar en la oposición?

—Sí. Somos gente seria, honrada y legal. Estaremos al pie del cañón, gobernando o en la oposición.