Los socorristas, junto a la caseta donde atienden a los bañistas.

Formentera cuenta con un equipo de socorrismo propio desde 2003 que se encuentra enmarcado en el Plan de Seguridad de Playas de la isla y que ha sido tomado como ejemplo en encuentros sobre salvamento celebrados tanto en el ámbito nacional como internacional.

Se trata de un servicio que ha ido creciendo no sólo en efectivos, sino también en medios materiales que permiten una mejor efectividad a la hora de realizar las intervenciones pertinentes.

Este año, desde el Consell Insular, se han instalado dos nuevas casetas en las playas de Levante y en ses Illetes, acordes con la que funciona en la zona des Arenals, en Mitgorn.

Según explicó a este periódico la consellera de Medioambiente, Silvia Tur, «la intención ha sido aportar un espacio acotado, donde los socorristas puedan ofrecer primeros auxilios a aquellas personas que se acercan a sus puestos con pequeñas heridas, picaduras de medusas u otras contingencias, e incluso atenderlos hasta que lleguen los servicios de emergencias si la situación lo requiere».

En dichos espacios los efectivos disponen de material para curas, defibriladores de última generación, camillas y tablas rígidas para el traslado de los heridos. El coste total de estas dos nuevas estructuras asciende a 6.000 euros y hace dos semanas que ya se encuentran en funcionamiento, aunque alguna parte del mobiliario como las camillas se prevé que lleguen en los próximos días.