La consellera de Medio Ambiente de la institución insular, Daisee Aguilera, aseguró ayer que la isla ha superado «la fase más crítica» de escasez de agua, y que las reservas producidas por la planta desaladora de es Ca Marí se encuentran al 30%.
«Las reservas se consideran suficientes para finalizar la temporada sin ningún problema en el servicio», aseguró la consellera.
La institución insular aprobó este bando el pasado 20 de julio para no agotar sus reservas hídricas, después de que una avería en la planta desaladora, ocurrida el pasado 11 de junio, provocara una disminución de la producción de agua desalada y de las reservas acumuladas en los depósitos de la isla.
Las medidas
El bando estableció medidas aplicadas por el Consell de forma interna y que consistieron en reducir al mínimo los riegos de los jardines públicos, limpiar las calles sólo en casos excepcionales, suspender el riego de caminos y aparcamientos, y el lavado de vehículos institucionales.
También se hicieron recomendaciones a la población enfocadas a limitar el consumo y a hacer un uso responsable del agua, mediante consejos como evitar actividades recreativas con agua y la limpieza de vehículos.
Aguilera agradeció el «apoyo» de la población al seguir estas recomendaciones.
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