El Consell de Formentera presentó ayer el borrador del plan director sectorial de residuos de Formentera en el Consell d’Entitats, que contó con la presencia de 11 asociaciones que han recogido el documento y «harán sus aportaciones en los próximos días para enriquecerlo»,según explicó la consellera de Medi Ambient, Daisee Aguilera. Este plan, según informó la máxima institución insular de la pitiusa menor, está elaborado por la consultora ambiental Geprecon. «El objetivo es decidir el modelo de gestión de residuos de Formentera y adaptarlo a la normativa europea y estatal, que contempla la reducción de los vertidos biodegradables y el incremento de la recogida selectiva, entre otras medidas, con el objetivo de ser una isla más sostenible», según informó Aguilera. Este plan prevé la creación de dos plantas de tratamiento: «Una planta de tratamiento de residuos de construcción y demolición, que más tarde podrán ser reutilizados por el sector de la construcción y la administración, y otra planta de compostaje de materia orgánica, que permitirá la revalorización de esta fracción para su posterior uso enriqueciando los campos de Formentera», precisó Aguilera. Según prevé el plan, la recogida selectiva de materia orgánica se hará en un primer momento puerta a puerto para los grandes productores, como restauradores y hoteleros, y después de un año de la construcción de la planta se ampliará a la ciudadanía en general mediante contenedores en la calle.

Desde el Consell de Formentera destacaron que los datos de reciclaje de la pitiusa menor son tres veces superiores a la media nacional y este plan director de residuos se ha marcado como objetivo aumentar esta cifra de reciclaje. «Una de las propuestas que hicimos en el Consell d’Entitats es la de seguir avanzando en la eliminación total de las bolsas de plástico. Formentera ha sido pionera en su eliminación en los mostradores de los comercios y ahora se puede dar un paso más adelante», destacó Aguilera. La consellera confía en que el plan sectorial de residuos se pueda aprobar antes de que acabe el año y cuente con el soporte de la ciudadanía «que al final son los encargados de mejorar nuestra gestión de residuos», concluyó la consellera de Medi Ambient.