Isidor Torres es el gerente del Consell de Formentera y responsable de recursos humanos. | ARCHIVO

El PP en el Consell Insular de Formentera denunció ayer que la institución insular realiza una «gestión nefasta y sin planificación alguna en materia de per-sonal» desde su creación en 2007.

De esta manera, los populares reprochan al equipo de gobierno de Gent per Formentera que el actual gerente de la institución, Isidor Torrres, «se hizo, a través de su empresa privada en 2010, con los contratos para la redacción de la relación de puestos de trabajo con un fraccionamiento de contratos menores por valor de 26.000 euros», una adjudicación que «supuestamente se fraccionó de forma ilegal y que para mayor sonrojo a día de hoy sigue sin aprobarse, siempre bajo la coordinación de la misma persona, antes desde la empresa privada y en la presente legislatura desde la gerencia del Consell».

Desde el PP aseguraron que esta falta de planificación provoca entre otras cosas que el porcentaje de interinos sea del 80 por ciento, «con una fuerte inestabilidad y cambios de en los departamentos».

Además afirmaron que hay diversos departamentos que están «faltos de personal, bien sea porque este se marchan de la Isla por carecer de viviendas dignas, o por el mal ambiente que se respira dentro del Consell, o porque en otras ocasiones hay mucho personal de baja y no se cubre». Una situación que «repercute en la calidad de los servicios que se le ofrecen al ciudadano».

También añadieron que hay departamentos que llevan meses de retraso en la tramitación de expedientes, como es el área de urbanismo, agricultura, infraestructuras o educación, entre otros.

Otro de los departamentos que según el PP está falto de personal es el de Servicios Sociales. Los populares señalaron que en estos momentos el Centro de Día sólo tiene a dos trabajadoras familiares porque el resto está de baja, y estos puestos no se cubren, «con lo cual, el personal en activo ha de realizar un sobreesfuerzo».

Otro de los asuntos que criticaron los populares ayer es que la zona azul de la Savina «también ha tenido retraso en la contratación de los controladores, que se acaban de incorporar en el mes de julio, cuando la zona azul se debería de controlar desde el mes de mayo, al igual que el aparcamiento los días de mercado artesanal en la Mola o la regulación de la entrada de vehículos en es Cap, que el Consell prometía que empezaría el 1 de mayo y finalmente ha empezado hace escasos días».