Los turistas del Imserso se acercan a la recepción del hotel para pedir información relacionada con el destino. | Daniel Espinosa

Los pensionistas de las Pitiusas tienen serios problemas con la oferta de viajes del Imserso. El número de destinaciones se limita a tan solo 10 y en algunos casos esto provoca que sean muchos los jubilados que prefieran trasladarse a Palma, teniendo que asumir los costes extra del desplazamiento.

Este asunto se complica aún más si nos centramos en los residentes en Formentera, que aparte deben sumar otro trayecto, desde la menor de las Pitiusas hasta Ibiza, con el incremento que esto supone en el coste total y la mayor organización que conlleva.
«A ellos (los pensionistas) les apetece coger su vuelo y que cuando lleguen a su destino haya una persona que les asista, autobús y todo tipo de servicios», asegura a Periódico de Ibiza y Formentera Loli Moya, trabajadora de la agencia de viajes Es Freus: «Sin todas estas facilidades, los beneficiarios pierden bastante».

Por estas razones, las quejas entre los pensionistas formenterenses coinciden en reclamar a las autoridades competentes –en este caso desde el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social- una mayor igualdad en las prestaciones entre los distintos territorios y que los sobrecostes sean sufragados por parte de la administración.

«Las autoridades deberían tenerlo en cuenta», reclama Emiliano, residente en Formentera desde hace más de 50 años y beneficiario de este tipo de viajes. «Es una molestia tener que salir de Formentera teniendo que pagar unos costes que no habría que pagar», lamenta.

Como él, son muchos los que reclaman una mayor igualdad entre los pensionistas de las Pitiusas y del resto de territorios.

Es el caso de Hilario, también vecino de Sant Francesc. Nunca ha salido de viaje a través del Imserso, pero con estas condiciones asegura que prefiere seguir haciéndolo por su cuenta durante mucho tiempo: «Yo querría que estas dificultades dejasen de existir y que los formenterenses tuviesen los mismos derechos que tienen los de Barcelona, los de Madrid o los de cualquier otro lugar». De seguir así, afirma, no viajará nunca con el Imserso.

Dadas las circunstancias, el número de pensionistas de Formentera que se acoge a las ‘ventajas’ del Imserso es muy reducido, tal y como confirma Loli Moya, de la agencia Es Freus: «Hay un público que viene y repite cada año, pero no es una gran cantidad de gente». «En cifras no son más de 20 o 30», señala.

Moya también incide en el problema que supone que muchos viajes que ofrece el Imserso no incluyan transporte y que los que sí lo hacen sean muy limitados. «No tiene nada que ver el jubilado que se beneficia de esto en Palma con el que se beneficia aquí en Formentera», precisa. Desde la agencia de viajes prueban que «cada año es más complicado y hay una menor disponibilidad». «La oferta que hay es muy limitada ya para la gente de Ibiza, imagina cómo debe ser para la gente de Formentera con el tema de las barcas y demás», comentan.

Ante esta situación, parece ser que los pensionistas formenterenses han encontrado una mejor solución, como apuntan desde la agencia: «Los propios clubs de jubilados acaban haciendo sus propios viajes».

Así, las escapadas organizadas por las asociaciones de jubilados parece que son la mejor solución, mientras muchos siguen pidiendo mayor atención y las ayudas que merecen.