Aires Formenterencs está compuesto por Xomeu Joan, Xico Ferrer y Santi Marí y en ocasiones están acompañados por el productor y músico Miquel Brunet. | Redacción Cultura

A mediados de los años 80 del siglo XX tres amigos – Xomeu Joan, Xico Ferrer y Santi Marí – junto a más gente acudían regularmente a uno de los restaurantes de moda de la época en Formentera. Se lo pasaban bien y siempre acababan tocando canciones tradicionales con sus guitarras y con instrumentos típicos de las Pitiusas como la flaüta, el tambor o les castanyoles. Como vieron que disfrutaban mucho y aquello no se les daba del todo mal un día se plantearon dar un salto más y formar un grupo de folk. Se atrevieron, lo llamaron Aires Formenterecns, y este mes de marzo de 2019 aquel trío de amigos cumplirá en plena forma sus treinta primeros años en la música.

Dieron sus primeros pasos en 1988 y en marzo de 1989 se presentaron oficialmente. Lo hicieron algo más jóvenes pero con la misma ilusión «por cantar a Formentera y difundir lo más posible lo bonita que es esta pequeña isla del Mediterráneo». Desde el primer día Aires Formenterencs está compuesto por Bartomeu Xomeu Joan Escandell (voz, guitarra acústica, flaüta, tambor y mandolina), Francesc Xicu Ferrer Serra (voz, guitarra española y espasí) y Santi Marí Escandell (voz, laúd, guitarra, tambor y castanyoles). El primero compone las músicas y la letra de algún tema mítico del grupo como Visca Formentera mientras que Xicu es el letrista principal. «Seguimos siendo un grupo de amigos que empezamos para pasarlo bien y que con el paso de los años parece que no lo estamos haciendo del todo mal porque hemos cumplido treinta años y aún nos queda mucha cuerda», aseguró ayer con una gran sonrisa a Periódico de Ibiza y Formentera Xomeu Joan.
«Fuimos aventureros y una novedad»

Joan reconoce que apostar a finales de los años 80 por una música influenciada por del folk recuperando instrumentos tradicionales de las Pitiusas fue de aventureros. «Era algo que no había hecho nadie o casi nadie y eso también fue una novedad que creo que jugó a nuestro favor, sorprendiendo a muchos de los que nos escuchaban, provocando que poco a poco fuésemos más conocidos».

Desde el primer momento apostaron por letras de clara influencia mediterránea y por letras en las que se hace referencia a Formentera, el mar, la sal, la tierra, los marineros, los pageses, las torres de defensa o los molinos que pueblan la isla. Además, se atrevieron a poner música a poemas de escritores en lengua catalana que, fusionados con la música del tambor, la flaüta o el espasí y también de un piano o una batería, ha hecho que tengan un sonido propio y fácilmente identificable.

Su primer trabajo fue un single que se grabó en 1990 en Palma. Tenía tres temas, entre ellos Visca Formentera, una canción que Xomeu compuso mientras hacía el Servicio militar obligatorio en el destacamento de Marina y que con el paso de los años se ha convertido en un himno oficioso de la menor de las Pitiusas. Fue el inicio de unos años frenéticos en los que la banda acumulaba conciertos en un mismo fin de semana en distintas localidades de Ibiza. Además, hicieron de teloneros de grandes artistas en catalán como María del Mar Bonet en el Teatro Principal de Maó, Marina Rossell en la localidad mallorquina de Pollença y con Joan Manuel Serrat en Formentera.

Cinco discos desde 1991

En noviembre de 1991 publicaron con la compañía discográfica Ona Música de Bunyola, Mallorca, su primer disco de larga duración, titulado Mots i acords per penyora, y en verano de 1992 representaron a las Pitiusas en la Exposición Universal de Sevilla. «Fue sorprendente pero la experiencia estuvo bastante bien porque aunque tocábamos en un lugar apartado de los grupos considerados importantes a la gente le gustaba mucho lo que hacíamos y se interesaban bastante por los instrumentos tradicionales de nuestras islas», recuerda Xomeu.

En 1993 sacaron al mercado su primer trabajo en formato de CD, Rosa Mar i falzia, editado por Onda Digital, y después llegaron Pàgines enrere en 1997, Illa Endavant en 2004, Ombres de llum en 2010 y Aniversaires, un disco grabado en los estudios Ona de Bunyola y que supuso una recopilación sus primeras dos décadas como banda. Durante la grabación conocieron a Miquel Brunet, quien desde entonces les acompaña en muchos de sus conciertos. Actualmente y según aseguró ayer Xomeu Joan el grupo está muy cerca de terminar un disco nuevo que verá la luz dentro de poco «y que servirá también como celebración de los treinta primeros años del grupo».

El trabajo de tantos años ha sido reconocido con numerosos premios. Aires Formenterencs puede presumir de haber sido reconocido con el Premio Ramon Llull que otorga el Govern balear en el año 2012 «por su labor de recuperación del legado musical y poético de Formentera», en 1994 con el Premio Sant Jordi que otorga anualmente el Institut d’Estudis Eivissencs, con una medalla conmemorativa del Consell d’Eivissa cuando la banda cumplió sus primeros 25 años y en 2014 con el Premio Sant Jaume que otorga el Consell de Formentera.

A lo largo de su trayectoria Xomeu, Xico y Santi siempre han cantado al Mediterráneo pero fundamentalmente a su tierra, Formentera. Han pasado treinta años desde sus inicios pero siguen con las mismas ganas aunque todo haya cambiado mucho. «No hay que darse por vencidos y tenemos que seguir cantando porque la isla sigue manteniendo su esencia y las raíces de ella, que beben del agua, del mar y del campo, siempre estarán ahí y no se deben perder nunca».