La fibra óptica ya alcanza a todos los núcleos urbanos de Formentera, según informaron ayer desde el Consell Insular, a través del Área de Nuevas Tecnologías.

El despliegue, que comenzó en 2017, se ha completado con la finalización de los trabajos llevados a cabo a las zonas de es Ca Marí, ses Bardetes y parte de es Cap de Barbaria.

La segunda fase del plan se desarrollará a partir del año 2020 y continuará con el despliegue de la fibra óptica al resto de viviendas diseminadas de Formentera y con la eliminación del cableado de cobre.

El primer casco urbano que accedió a este servicio fue Sant Francesc en abril de 2018, y después se han ido conectando es Pujols, sa Roqueta, el polígono industrial, Sant Ferran, la Savina, la zona de es Caló, la Mola, y ahora es Ca Marí, ses Bardetes y una parte de es Cap de Barbaria. También se han conectado a la red otros lugares próximos a los cascos urbanos.

El plan para instalar la red de fibra óptica ha sido cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional de la Unión Europea (FEDER) y se ha llevado a cabo por las compañías Telefónica y Teleco, en colaboración con el Consell de Formentera.

Uno de los objetivos del plan es también sustituir el cableado aéreo actual por canalizaciones sepultadas.

La consellera de Nuevas Tecnologías, Vanessa Parellada, subrayó en un comunicado que con esta red, «Formentera se pone al nivel otros territorios del Estado».