Imagen de archivo del hospital de Formentera.

En agosto del pasado año se incorporó un segundo cirujano al hospital de Formentera, pero al cabo de pocos meses y «por motivos personales» éste acabó causando baja. A su marcha, se añadió la baja por enfermedad del titular de cirugía de los últimos años.

Esta situación dejó al hospital sin facultativos de cirugía para atender a los pacientes formenterenses. El área de Salut respondió activando un plan de contingencia a principios del pasado mes de noviembre.

Este plan consiste en trasladar cirujanos de Can Misses que atienden las intervenciones pequeñas y las consultas. Los casos urgentes, en caso de producirse se trasladan al hospital de Ibiza.

Según el IbSalut, siguen buscando a un profesional que pueda incorporarse en breve, a través de anuncios en Colegios Oficiales, Sociedades Científicas y otros organismos. Las mismas fuentes manifiestan que está resultando complicado, pero son optimistas y esperan resolverlo en breve.

Desde el Sindicato Médico de Baleares (Simebal), el doctor Carlos Rodríguez va más allá y achaca el problema a la «triple insularidad» de Formentera. Según Rodríguez, «la carestía de la vida en la isla, la falta de vivienda asequible y unas condiciones laborales poco atractivas» dificultan enormemente que un profesional se interese por una plaza en Formentera.

A juicio del facultativo, teniendo en cuenta estos inconvenientes, el área de Salud debería ser consciente y ofrecer unas condiciones laborales más atractivas que ayudasen a solucionar el problema.

Además, el doctor añade: «Para un cirujano, resulta mucho más atractivo y enriquecedor optar por un hospital de referencia en el que va a aprender mucho más».

No obstante, el sindicato advierte de que se trata de un problema global. Salen pocos médicos de las facultades para las necesidades que tiene la sanidad pública: «Estudiar medicina es poco atractivo; hay que dedicar muchos años y la nota de corte es muy alta».

El caso de los cirujanos se puede extrapolar al resto de profesionales sanitarios. Los pacientes de Formentera han acabado acostumbrándose a que su médico de cabecera sea diferente cada vez que acude a la consulta. No se consolidan las plazas y, por ejemplo, ayer mismo sin ir más lejos una de las doctoras no puedo asistir por motivos familiares y sus pacientes tuvieron que ser reubicados con otros facultativos, con la consecuente carga de trabajo que conlleva.

Tal es la magnitud del problema que en el pleno del Consell de Formentera del pasado mes de noviembre se aprobó unánimamente instar al Govern a que solucione el correcto funcionamiento del servicio de cirugía «para la correcta asistencia hospitalaria de la población de la isla».

Los datos
Desde su activación en noviembre y hasta esta última semana, los cirujanos procedentes de Ibiza han atendido a 41 pacientes. Un total de tres casos han sido derivados a Can Misses, pero por su gravedad hubiesen sido dirigidos igualmente al hospital ibicenco.

El servicio de cirugía pasa consulta semanalmente los martes y para el de la próxima semana hay ya 14 pacientes citados.

Actualmente no hay lista de espera para cirugía en el Hospital de Formentera.