Rafael Lambies cuenta el por qué de su marcha.

Que abandone el islote de s’Espalmador y regrese a su puerto base en Valencia. Es la recomendación que las autoridades realizaron hasta en tres ocasiones y por diferentes vías a Rafael Lambies, el patrón de 54 años de un velero que hace tres semanas fondeó junto al islote de Formentera.

Lambies llegó a Formentera a bordo del Isla de Pascua justo antes de decretarse el estado de alarma. Tras la entrada en vigor del estado de alarma y las medidas de restricción impuestas por la crisis del coronavirus, el navegante permaneció en la isla y su ‘particular confinamiento’ ha tenido un amplio eco mediático.

Desde la Delegación del Gobierno explicaron ayer que Lambies estaba informado desde el primer momento de que su presencia allí no podía prolongarse en el tiempo. En este sentido, indicaron que la Guardia Civil le acompañó y permitió desembarcar en Formentera para que hiciese acopio de víveres, pero que dadas las restricciones que imponía el estado de alarma y el decreto de cierre de los puertos de Baleares se le invitó a que pusiera rumbo a Valencia.

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Esta sugerencia se la realizaron posteriormente Capitanía Marítima y también la Delegación del Gobierno. Las mismas fuentes indicaron que «en un principio se le respetó porque buscaba refugio, pero durante este tiempo ha estado desembarcando en el islote. Confiamos en que atienda las recomendaciones», apuntaron.

Rumbo a Valencia

Rafael Lambies manifestó ayer por la mañana su intención de permanecer en s’Espalmador y que solo abandonaría la isla si le trasladaban una orden por escrito. El ocupante del Isla de Pascua defendió no estar haciendo nada ilegal y que incluso es un problema menos, ya que no tiene nadie a su alcance al que pueda contagiar o que le pueda contagiar.

«Yo no tengo que ir al puerto, ni salir de él, yo estoy en un barco en el mar y ninguna ley me lo impide, de momento», explicó. A pesar de estos argumentos, a media tarde de ayer, Lambies anunció que por la noche pondría rumbo a Valencia. «No estoy conforme. Es más, cuando llamé a Capitanía de Valencia me han dicho que no entendían porque regresaba», apuntó Lambies, el lobo de mar que hoy debería arribar al puerto de Valencia.